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Minimiza Pemex derrame

Limpia la paraestatal el crudo en el río Chiquito y asegura que se trató sólo de un escurrimiento

AGENCIAS

MÉXICO, DF.- La paraestatal Petróleos Mexicanos informó ayer que ya limpió el nuevo derrame de crudo ocurrido el pasado fin de semana en Veracruz y aseguró que fue menor a lo que informaron las autoridades de ese estado.

La división de Refinación de Pemex aseguró que no hubo un derrame, sino ?un escurrimiento? de acciones derivadas de trabajos de mantenimiento totalmente controlados y que no se afectó al río Chiquito.

Esta versión contrasta con las quejas de los habitantes de los asentamientos cercanos y las versiones de autoridades del municipio de Nogales, quienes se quejan no sólo de los olores sino del derrame de los ductos de Pemex al afluente.

La compañía indicó en un comunicado que el escurrimiento de un oleoducto que se registró el sábado en el cauce del río Chiquito, en Ciudad Mendoza, fue de 100 litros de mezcla de diesel y petróleo, y no de 500 litros, como señalaron el domingo las autoridades de Veracruz.

Pemex señaló que personal de la compañía ?recuperó la totalidad del producto y concluyó la limpieza del mismo?.Destacó que la fuga de combustible no provocó daños a las comunidades, al medioambiente, ni a los ecosistemas de la zona donde ocurrió.

En el área adyacente se detectaron capas muy delgadas del combustible a lo largo de unos 600 metros, las cuales fueron retiradas por técnicos y obreros de Pemex.

En esta misma zona estalló en 2001 un conducto de la compañía estatal que dejó un resultado de seis personas muertas y 80 heridas.

Sin embargo, lo que preocupa a los funcionarios de Nogales es que, a pesar de que el incidente se produjo en instalaciones que Pemex tienen a cuatro kilómetros de la zona urbana, los olores llegaron hasta la población.

El Gobierno Municipal aguardará la valoración de las dependencias correspondientes, lo cual esperan a la brevedad posible para a su vez informar a los pobladores, quienes se mantienen alertas, pues hace año y medio el rompimiento de unos ductos de Pemex que pasaban por debajo del Río Chiquito provocó una explosión que dejó muertos y heridos.

En la región afectada permanece personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y de la Comisión Nacional del Agua (CNA) para realizar estudios del impacto del escurrimiento de diesel en la zona donde personal de Pemex-Refinación realizaban trabajos de mantenimiento.

Al respecto, el delegado de la Profepa en Veracruz, Francisco Briceño, pidió esperar a los resultados para emitir una valoración.

?Dependiendo de los resultados se tomarán las medidas correspondientes?, expresó.

En los últimos dos años, en el estado de Veracruz se han registrado cerca de 20 accidentes y derrames en instalaciones de Pemex y algunos de los más graves han ocurrido a partir de diciembre pasado.

El 22 de ese mes, una explosión en una estación de bombeo de Pemex reventó un oleoducto y provocó un derrame de cinco barriles de crudo en el río Coatzacoalcos.

Casi un mes después, un incendio en una zona de residuos de Pemex en el municipio de Cuichapa, al Sur del Estado, causó una explosión en un equipo de perforación.

Posteriormente, el pasado 25 de enero, una fuga de gasolina volátil (etanol) o ?nafta ligera? dejó unas 200 personas con síntomas de intoxicación, igual número de animales muertos y dos arroyos contaminados en Agua Dulce.

Sólo dos días después, una fisura en un oleoducto subterráneo de Pemex vertió más de 100 mil litros de crudo en el municipio de Hueyapan de Ocampo, también en Veracruz.

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