-Maestro -le preguntó a Hu-Ssong uno de sus discípulos-. ¿Qué estabas haciendo cuando recibiste la iluminación?
Le contestó el filósofo:
-Estaba podando las ramas de un árbol.
Volvió a preguntar el estudiante:
-Y ¿qué hiciste después de recibir la iluminación?
Respondió Hu-Ssong:
-Seguí podando las ramas del árbol.
Meditó el discípulo las palabras de su maestro, y de ellas sacó una conclusión: las cosas de la tierra no deben apartarnos del cielo, pero las cosas del cielo tampoco deben alejarnos de la tierra.
¡Hasta mañana!..