A esta comida con motivo del Día del Padre asistieron dos mujeres. No estuvo presente ningún hombre.
La señora fue madre soltera. Me cuesta mucho trabajo usar esa expresión: "madre soltera". A la palabra "madre" no se le debería añadir ninguna nota distintiva. Ser madre es algo tan grande y tan valioso que nada importan las calificaciones -anacrónicas ya, por lo demás- que suele añadir la sociedad.
El caso es que la hija de esta señora no conoció a su padre. Padres desconocidos hay muchos, aunque se les conozca. Y esta señora fue para su hija padre y madre. Por ello la hija festeja a su mamá el Día de la Madre, y la festeja también el Día del Padre.
A mí eso me parece algo muy hermoso. A esta comida del Día del Padre asistieron dos mujeres. Las dos muy mujeres.
¡Hasta mañana!..
