HISTORIAS DE LA CREACIÓN DEL MUNDO
Apenas habían acabado de comer la manzana cuando Adán y Eva se vieron ante la presencia de su Creador.
Severidad terrible había en el rostro del Augusto, y de sus ojos brotaban chispas de cólera. Confusos, la mujer y el hombre no osaban levantar la vista, y con torpes movimientos trataban de cubrir su desnudez.
-¿Quién comió primero? ?preguntó el Señor-. ¿Cuál de los dos es más culpable?
En silencio quedaron las criaturas. Los dos sabían la respuesta: Eva fue quien primero cedió a la tentación. Pero los dos callaron. La mujer porque tenía miedo: el hombre porque la amaba.
Entonces un ave que estaba cerca pidió hablar. Era del sexo femenino, y naturalmente quiso defender a Eva.
-Adán es el culpable- dijo ?Adán comió primero.
Una larga mirada echó el Señor sobre la acusadora y luego, con tono reposado, la reprendió.
-Mientes ?le dijo- ¿No sabes que tu Señor conoce toda la verdad? Has calumniado. Echaste culpa sobre aquél que culpa no tenía. Te condeno, entonces, a ser tú también calumniada. Habrás de ser culpada por los hombres de aquello de que sólo los hombres habrán de ser culpables.
Así dijo el Señor al pajarraco. Y luego lo despidió diciéndole:
-Y ahora vete, cigüeña.
¡Hasta mañana!..