La Unión Europea dijo que sus relaciones con Cuba podrían verse afectadas tras las recientes expulsiones de parlamentarios europeos de la isla.
Berlín (EFE).- El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Joschka Fischer, criticó hoy la expulsión de Cuba del senador checo Karel Schwarzenberg y del diputado alemán Arnold Vaatz y calificó de de inaceptable la actitud de las autoridades cubanas.
"El proceder de las autoridades cubanas no es aceptable", declaró en Berlín el jefe de la diplomacia alemana.
Fischer afirmó que "es legítimo y se da por supuesto que los parlamentarios alemanes y europeos que visitan Cuba se entrevisten con grupos de la oposición y de defensa de los derechos humanos".
Aseguró que ese parecer ha sido debidamente trasmitido al embajador de Cuba en Alemania, Marcelino Medina.
Medina fue llamado a primeras horas de hoy a consultas por el Ministerio de Asuntos Exteriores.
Schwarzenberg y Vaatz, éste último vicepresidente del grupo parlamentario de la Unión Cristianodemócrata (CDU), primer partido de la oposición alemana, se encontraban en Cuba para asistir, como invitados, al congreso convocado para este fin de semana por la llamada "Asamblea para promover la Sociedad Civil".
Se prevé que a esa asamblea, iniciativa de tres antiguos presos políticos cubanos, asistan más de trescientos invitados extranjeros, entre ellos los premios Nobel de la Paz, Václav Havel y Lech Walesa.
Vaatz, que fue conducido desde su hotel hasta el aeropuerto, donde se le embarcó en un avión de Iberia con destino a Madrid, declaró en conversación telefónica a la agencia alemana dpa que "las autoridades cubanas no le permitieron en ningún momento contactar con el personal de la embajada alemana" en la isla.
"Esa actitud constituye una violación flagrante del derecho internacional", dijo Vaatz a su llegada a la capital española.