Pablo Montero aprovecha el foro de la Feria de Gómez para enamorar a las laguneras.
El Siglo de Torreón
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Pablo Montero lo volvió a hacer: cantó, bailó y enamoró a las decenas de seguidoras que lo acompañaron la madrugada del domingo en el palenque de la Feria Nacional de esta ciudad.
?El Charrito Rico? tuvo la encomienda de iniciar con el ciclo de conciertos que diferentes artistas ofrecerán en el redondel durante todo julio; aunque la del domingo no fue la primera ocasión que el artista actuó en el palenque Vicente Fernández, sí se distinguió por ser uno de los espectáculos en donde el público se le ha entregado con mayor efusividad.
Su entrada fue triunfal: los alaridos y las notas del mariachi Emperadores y una orquesta conformada por seis músicos.
Su elegante traje de charro color verde seco contrastaba con el negro de la noche, pero no así con las intensas ganas que tenía de complacer a su gente, para quien preparó un espectáculo de tres horas de duración plagado de música, baile y emociones.
Las aproximadamente mil quinientas personas que se dieron cita lo aguardaban entusiastas. Los organizadores habían anunciado que el concierto iniciaría en punto de la media noche, pero no fue sino hasta pasada la una de la mañana cuando Montero apareció en el ruedo.
Desde el inicio, el popurrí conformado por Serenata Huasteca, El Siete Mares y México Lindo y Querido dejaron ver que el show estaría lleno de alegría. ?Buenas noches, ¿cómo están las muchachas de La Laguna? Espero que se la pasen bien. Yo soy Pablo Montero y estoy a sus órdenes?...
Y así fue, pues hizo todo lo que su fiel público le pidió: envió besos, regaló su moño (a Jaret Borgheti), bailó y dedicó canciones a diestra y siniestra, aunque la dedicatoria especial la hizo a su padre con quien cantó Acá entre Nos.
En las primeras filas del palenque sobresalían además, su invitada Mariana Seoane, la señora Mercedes de Hernández (mamá de Montero) y su abuela a quien presentó, los ex Big Brothers Kike y Murad, así como y Jorge ?Coque? Muñiz, quien hizo las veces de presentador al inicio del concierto.
En el repertorio hubo de todo y para todos, los enamorados cantaron temas de Javier Solís así como los éxitos ¿Dónde Estás Corazón?, ¿Qué Voy a Hacer sin Ti?, Cenizas, Sombras y Hay Otra en tu Lugar, las cuales resonaban en las instalaciones del palenque gracias a los instrumentos del mariachi.
Luego de una hora y media de iniciado el show, Pablo se retiró repentinamente del redondel, la confusión se apoderó de muchas personas, ya que pensaron que el concierto había terminado, pero casi de inmediato volvió pero ahora con tejana y chaqueta norteña.
Para entonces uno de los elementos de la orquesta ya tenía en sus manos un acordeón: la combinación de los éxitos de Ramón Ayala y la voz de Montero hicieron ?estallar? a las ya enloquecidas admiradoras, quienes se desvivieron en halagos hacia él durante toda la noche.
La fiesta continuó hasta las cuatro de la mañana con canciones como El Tiempo pasa, Tragos de Amargo Licor, Un Rinconcito en el Cielo, Se me Olvidó otra Vez y Tristes Recuerdos. Definitivamente la presentación del lagunero no fue como la que han ofrecido otros artistas en el palenque Vicente Fernández. Él y su empresa ?echaron toda la carne al asador?, demostrando que Pablo Montero, ?el Charrito Rico?, siempre va a lo grande.