Nuestro país es un balde lleno de paradojas y el Estado de Coahuila un barril repleto de utopías, los sindicatos de profesores (SNTE) y la SEPC (Secretaría de Educación Pública de Coahuila) están ahora preocupados por sacar dos grandes proyectos: uno nacional y otro estatal. El primero se llama Elba Esther Gordillo, la profesora rural más rica del mundo y el otro, lograr que el profesor, Humberto Moreira Valdés, sea gobernador de Coahuila. Las diferentes cabecillas de las secciones de profesores, la Sección 35 de La Laguna con Gerardo Alba Castillo, la Sección 5 de Saltillo y el resto del estado con Rubén Moreira Valdés al frente y la 38 con Campos como jefe, se pusieron en guardia y velan armas en pos de defender a Elba Esther Gordillo por la trastada que el PRI -su mismo partido- le hizo.
Como relámpago reaccionaron los sindicatos y aquí el pueblo se pregunta ¿por qué desde hace tiempo Coahuila está sumido en el atraso de aprovechamiento, ocupando el lugar 27 en México, y nadie de los líderes levantó su puño o gis para combatir ese rezago?
Desde hace tiempo Coahuila ocupa un lugar vergonzoso en educación y aprovechamiento aunque el mismo Moreira lo niegue y sin embargo, existe un gran número de aviadores, comisionados, maestros con dobleplaza y con carrera magisterial fantasma, además con maestros ocupando puestos en las diferentes dependencias, etc.
Coahuila ocupa el tercer lugar (la Comarca Lagunera con la Sección 35 el primer lugar en relación al numero de profesores). Y de esto que sí es pavoroso nadie dice algo, del reparto de favores: las llamadas “conquistas sindicales” por parte del sistema.
Mientras los padres de familia hacen gambetas y malabares para completar la lista de útiles escolares y pagar la cuota en las escuelas públicas y gratuitas (según el Artículo tercero constitucional), en los sindicatos de profesores el pleito es por los puestos públicos a nivel nacional y estatal, lo que equivale a que muchos profesores sean raptados y utilizados por otros.
Si Moreira ocupa la silla del Palacio Rosa de Saltillo y se convierte en el próximo gobernador, en gran parte se lo deberá a los profesores, que aunque son la minoría de estas agrupaciones corporativistas (SNTE), sus tentáculos agachistas y lacayistas se dejan sentir en el PRI como serviles vasallos.
Desde hace tiempo, cuando el profesor Humberto Moreira, ocupó el puesto de INEA (Instituto Nacional de Educación Abierta), Óscar González Pimentel era secretario de la SEPC, los dos se confabularon para hacerle creer a la sociedad que Coahuila, con el 7.9 grado de escolaridad, estaba a la par de países como Canadá y E.U.A.
El fraude fue compuesto por estos dos pillos que el pueblo de México en general -y Coahuila en particular- paga y ahora sin remordimiento ambulan en la pasarela de la política con alfombra roja y protocolos de glamour: Óscar en los recintos de la tribuna más alta de nuestro país como legislador y Humberto Moreira como candidato y sin duda como están las cosas, con la ayuda de todo el tren constitucional -incluyendo el mismo IFE estatal- será el próximo gobernador de Coahuila.
Veamos: cuando el fraude se da en el INEA, a los profesores se les pagaba por cada alumno (personas mayores o jóvenes que no habían completado la instrucción primaria o secundaria). El pago por cada adulto con el certificado en la mano era de aproximadamente 650 pesos, lo que dio margen que cientos o miles de personas recibieran el certificado y por ahí también se hicieron certificados hasta para repartir como volantes.
De esto nadie quiere hablar. Raúl Onofre, suplente del diputado Eduardo Olmos y ahora candidato para la alcaldía de Matamoros Coahuila, dice que el del fraude fue Óscar González Pimentel y no su compadre Humberto Moreira. Sin embargo, Jesús de Anda Acosta, secretario de la SEPC en la Región Lagunera, ex secretario de la Sección 35 y encargado en ese entonces de este programa dice desconocer, se hace el occiso e inclusive reniega de Moreira y del mismo PRI por la “gachada” que le hicieron en Francisco I. Madero, Coahuila.
Todos los servidores públicos defienden su puesto, la sociedad les vale un comino. Lo del fraude del INEA es tema sepultado. Con esas personas al frente de la administración, ¿qué puede esperar Coahuila en lo que a educación se refiere?
Y es aquí donde los verdaderos profesores, desde el kinder hasta la universidad y que están frente a grupos, que no son prófugos del gis, los que nada quieren saber de los aviadores ni de los comisionados y algunos metidos a mapaches por más de 20 años al servicio del PRI, profesores que son unos héroes del magisterio, los que no necesitan de cursitos y cursotes de dos días antes de comenzar el ciclo escolar para dar más del cien por ciento en el aula, son los que hacen falta.
Sí, hacen falta más hombres y mujeres como ellos: capaces, inteligentes y honestos para efectuar un cambio intelectual, emocional e histórico por la juventud y niñez de México, y no líderes charros que sólo roban tiempo, ideas y sumergen a la sociedad en una atroz incertidumbre.
Es una lástima que algunos mentores, anden de mandarines y bufones de los candidatos, que sean perritos falderos, cuando en ellos está la responsabilidad de abrirles los ojos a la niñez y la juventud de tanta ignominia y usufructo que el pueblo recibe de muchos políticos que, con engaños, tienen el país en el oscurantismo.
La Fuerza Aérea más poderosa en México al servicio de la profesora rural más rica del mundo dice presente. Pronto pasarán lista con Sigfrido Macías que para variar también trabaja -o cobra- en la SEPC.
Pobre Coahuila con candidatos por doquier: algunos resucitados, otros adjudicándose logros invisibles. Lástima que ahora los candidatos ponderen sus logros y que según ellos (casi todos ex funcionarios públicos) el pueblo tiene que vivir agradecido por sus propuestas.
Entonces ¿para quién trabajaban estos barbajanes? y ¿quién les pagó mientras medio cumplían con su labor de gestión en la administración pública, el pueblo o alguna empresa?
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