Piden justicia los familiares de Julio Abraham Hernández Victorino, de 26 años, quien fue asesinado el pasado lunes a causa de un fuerte golpe en la cabeza, a unos cuantos metros de su domicilio, en la colonia 16 de Septiembre, hecho en el que se presume que los responsables fueron algunos vándalos de sectores aledaños a esa zona.
Norma Leticia Hernández Victorino, hermana del hoy occiso, dijo que aunque ellos no se percataron de quién o quiénes le pudieron ocasionar la muerte a su consanguíneo, la Policía debe investigar y dar a conocer quién fue el responsable del homicidio.
Aseguró que su hermano no tenía problemas con nadie y que con los vecinos de esa colonia se llevaba bien pues los conocía desde niños; sin embargo, no descartó la posibilidad de que los ?cholos? de otra zona hayan sido los que le provocaron la muerte.
Los hechos ocurrieron aproximadamente a las 20:30 horas, en la esquina que forman las calles Trabajo Social y Del Riel, precisamente a un costado de la escuela secundaria No. 3 Jaime Torres, donde la falta de alumbrado público fue factor primordial para que se desconociera la identidad de los maleantes.
Dijo que apenas unos minutos antes, Julio había salido de su casa a bordo de una bicicleta, y momentos después recibieron la noticia de que le habían causado la muerte, presentando un golpe en la boca, con el que se presume que lo dejaron inconsciente y después le arrojaron una piedra en la sien, de lado derecho, encontrándose a 30 centímetros de su cabeza el risco con el que le cortaron la existencia, causándole traumatismo directo de cráneo.
EXCESO DE DROGADICTOS EN LA 16 DE SEPTIEMBRE
Los vecinos de la colonia 16 de Septiembre señalan que el exceso de droga que se consume en ese lugar ha provocado que se registren varias riñas, robos y asaltos, asegurando Guadalupe Núñez, quien vive en la calle Instituto de la Vivienda, que los mismos ministeriales son los que la venden, cerca del gimnasio ubicado en la colonia Benjamín Méndez.
También otra señora, que no quiso dar su nombre por temor a represalias, asegura que una lideresa social, quien vive en la calle Trabajo Social, casi esquina con Ángel Rodríguez, se vale de que la autoridad no le hace nada para dejar que su familia venda droga y roben en interior de vehículos.
