El aparato se impacta con un edificio cuando el piloto intenta hacer un aterrizaje de emergencia.
AP
TEHERAN, Irán.- Un avión de transporte militar con periodistas iraníes a bordo que trataba de hacer un aterrizaje de emergencia se estrelló contra un edificio de viviendas de diez pisos, arrancándole la parte superior y provocando un enorme incendio. Por lo menos 128 personas murieron.
Las 94 personas que iban a bordo murieron, muchos de ellos periodistas iraníes que iban a cubrir maniobras militares en el sur. Treinta y cuatro residentes del edificio también murieron, y 90 sufrieron lesiones, dijo radio Teherán.
Las llamas emergían por las ventanas, por el techo y pisos del edificio mientras los moradores aterrorizados trataban de escapar del complejo de torres Towhid, donde residen familias del personal de la Fuerza Aérea en el suburbio Azadi de la capital iraní.
Cayeron escombros sobre una estación de gasolina aplastando automóviles estacionados. Junto al edificio ennegrecido ardían varias estructuras.
Los bomberos lograron extinguir el incendio en el edificio, que resultó dañado y carbonizado pero en pie. La Policía acordonó el sitio del siniestro e impidió el acceso a la prensa y a unas diez mil personas que pugnaban por acercarse al lugar. Muchos gritaban, temerosos que sus familiares hubiesen fallecido. Varias horas después del accidente, el edificio seguía humeante.
?Fue como un terremoto?, dijo Reza Sadeqi, un comerciante de 25 años que vio cuando el avión se estrellaba en el edificio. ?La fuerza del impacto me lanzó a tres metros de distancia en el interior de mi tienda?.
?Pude sentir el calor del incendio causado por el accidente. Fue como estar en el infierno?, relató. El avión, C-130, que había despegado del aeropuerto Mehrabad, se dirigía a Bandar Abas, una ciudad portuaria en el sur de Irán. La televisión estatal informó que el avión se estrelló debido a una falla técnica mientras su piloto intentaba hacer un aterrizaje de emergencia.
En 2003, un avión ruso Ilyushin-76 que transportaba a miembros de la Guardia Revolucionaria se estrelló en las montañas del sureste de Irán, muriendo 302 personas a bordo. Y en 1988, un avión comercial de las Aerolíneas de Irán fue derribado por el buque de la Armada de Estados Vincennes sobre el golfo Pérsico, muriendo 290 personas.