Para el gobernador Ismael Hernández Deras, la delincuencia en Durango no ha tomado dimensiones incontrolables, aún cuando ayer en la madrugada murió un elemento de la Ministerial, dos más resultaron heridos de gravedad y al parecer otros dos presuntos delincuentes perdieron la vida cuando se hizo un operativo para rescatar a cuatro paisanos secuestrados por los que se pedía un rescate de 50 mil dólares.
Y las consideraciones del Gobernador con respecto a la ola de violencia en Durango se dan luego de que a partir del 5 de octubre a la fecha, se han tenido en la entidad y más que nada en las cercanía de esta capital, un total de 16 crímenes o ejecuciones violentos, sin considerar los de ayer en la madrugada.
Así, tras condenar el secuestro de cuatro paisanos y el atentado contra tres agentes de la Policía Ministerial, uno de los cuales falleció en pleno tiroteo el viernes por la noche, el gobernador Ismael Hernández Deras negó que la delincuencia haya tomado dimensiones incontrolables en Durango.
Sin embargo, al ser abordado por la prensa en el marco del homenaje póstumo que la Procuraduría General de Justicia brindó al agente Ulises González Nájera, Hernández Deras reconoció que son nidos de delincuentes las zonas de colindancia de Durango con los estados de Nayarit, Chihuahua y Sinaloa.
González Nájera falleció este viernes por la noche en la balacera que protagonizaron una banda de secuestradores y el grupo policiaco que iría en detención de los delincuentes en el poblado Ricardo Flores Magón, del municipio de Canatlán.
El Gobernador de Durango dejó claro que la pérdida de un elemento de seguridad pública consterna a toda la sociedad, más aún cuando los hechos ocurren en el entorno de un acto de delincuencia organizada como el secuestro de los cuatro paisanos ?ya liberados-.
Pero, frente al cuestionamiento de si es o no alarmante la periodicidad de los crímenes que se han reportado de varios meses a la fecha en la entidad, el mandatario remarcó que no percibe un panorama complicado de inseguridad pública como para decir que la delincuencia ha llegado a niveles incontrolables.
FIRMEZA
En el operativo donde murió Ulises González los agentes daban seguimiento a una denuncia de secuestro en perjuicio de cuatro paisanos que tienen su residencia en la ciudad de Chicago, Illinois y acudían de visita a su tierra natal Tepehuanes; el monto que se exigía por el rescate era de 50 mil dólares (poco más de 550 mil pesos).
Entre la balacera, los plagiarios lograron aparentemente huir sin sufrir bajas; sin embargo, dos elementos más de la Ministerial, el agente Venancio Flores y el comandante Sebastián Rocha Veloz, padecen lesiones severas y están hospitalizados en la clínica del ISSSTE.
Ya la corte fúnebre se había llevado el cuerpo de Ulises de las instalaciones de la Procuraduría de Justicia; para acompañarlo, la señora Herlinda, su madre se retiró cuando el gobernador Ismael Hernández dijo que su Gobierno lamentaba profundamente la baja de un agente policiaco como la de este joven de 29 años.
Entre el ruido de las sirenas de patrullas y ambulancias, el mandatario declaró: ?La muerte del agente Ulises nos provoca un gran compromiso de seguir enfrentando de manera frontal a la delincuencia organizada. ¡Lástima que nos haya sucedido esto!?
Los resultados de haber rescatado a los cuatro secuestrados, después del deceso, se quedan por abajo, consideró Hernández Deras.
Pero, ?agregó- esto seguro que va a provocar que sigamos capacitando a los cuerpos policiacos y que se haga realidad el compromiso de duplicar los recursos para seguridad pública y procuración de justicia.
?No nos va a temblar la mano para enfrentar a la delincuencia organizada que, sin duda, hace presencia en el estado de Durango?, aseguró el titular del Ejecutivo estatal tras reconocer que los grandes focos de atención se localizan en las zonas de colindancia con los estados de Sinaloa, Chihuahua y Nayarit.
AVERIGUACIÓN
Opta por el silencio
El Gobernador del estado optó por no dar información sobre el avance de las investigaciones relacionadas con el paradero de los secuestradores que dieron muerte a Ulises González y que provocaron lesiones graves a dos elementos más de la corporación policiaca.
Ismael Hernández Deras argumentó que la sugerencia de los funcionarios de seguridad pública estatal es en el sentido de no dar a conocer nombres, ubicaciones ni avances porque, dijo, hay la posibilidad de caminar con seriedad y profesionalismo en la investigación.
?Sin duda esto no debe quedar impune y bueno, reitero, el hecho sucedió, ahí está y es una desgracia para la familia del agente, cuestión que habremos de cuidar y por la que trataremos de dar apoyo?, dijo.
Insistió que mientras no haya empleo en el país y mientras se mantenga la falta de comunicación entre las colindancias de Durango con Sinaloa, con una parte de Chihuahua y con Nayarit por el rumbo de Mezquital, esas regiones seguirán siendo nidos óptimos para la delincuencia.
