El Gobierno del Estado no ha tenido acercamiento con los integrantes de la familia Chavarría Diez para la posible renta del terreno de cinco mil metros cuadrados de las antiguas Instalaciones de la Feria, que desde el 2004 es de su propiedad.
Alejandro Chavarría Palmero, vocero de dicha familia que vendió al Estado el predio de 40 hectáreas donde se construye el nuevo Centro de Ferias y Exposiciones de Durango, aseguró que ninguna autoridad ha entablado diálogo con los propietarios del área donde se ubicaban los juegos mecánicos durante las anteriores emisiones de la Feria.
Se recordará que en el anterior sexenio el Gobierno Estatal compró a las familias Chavarría Diez y Chavarría Diez González una propiedad de 40 hectáreas localizada en el kilómetro cinco de la carretera a Mezquital, para la edificación del nuevo recinto ferial.
Aparte de dinero en efectivo, los particulares recibieron a cambio el dominio de cinco mil metros cuadrados de las antiguas instalaciones de la feria, localizadas en las faldas del Cerro de los Remedios, y su propiedad es precisamente toda el área que se destina para las atracciones mecánicas.
?Estamos en la mejor disposición de dialogar con el Gobierno si es que nos lo pide, pero hasta el momento no ha habido nada; entonces, nosotros no vamos a hacer nada al respecto si el Gobierno como interesado no nos busca?, declaró Alejandro.
Chavarría Palmero reconoció que a diferencia del anterior Gobierno, éste de Ismael Hernández Deras es totalmente distinto en cuanto a la política conciliadora que lo caracteriza.
Con el rescoldo del trato ríspido que tuvo el anterior sexenio para con sus integrantes, la familia Chavarría recuerda que en el gobierno de Ángel Sergio Guerrero Mier fueron tratados como delincuentes ?con la prepotencia y todo el poder del Estado que quería imponer su voluntad sobre una propiedad privada?.
Alejandro Chavarría dijo estar enterado de que en el terreno de las nuevas instalaciones el avance de la construcción del recinto ferial no es suficiente, lo cual hace suponer -admitió- que podrían usarse de nuevo las antiguas instalaciones del fraccionamiento Los Remedios.
Empero, insistió que de ser así se tendría que llevar a cabo diálogo y negociación con las familias Chavarría Diez y Chavarría Diez González, situación que hasta el momento no ha ocurrido.
El entrevistado dijo a El Siglo de Durango que la intención de ambas familias es llegar a feliz término con lo relativo a la realización de la Feria este año, por lo que rechazó que exista la posibilidad de que el Gobierno les vuelva a imponer sus condiciones como ocurrió el año pasado.
?Inclusive el DIF Estatal nos pidió prestado nuestro terreno para que sirviera de estacionamiento en la kermés del 20 de Noviembre del año 2004, a lo cual, como se trataba de apoyar a los niños pobres y la gente de escasos recursos, la familia accedió y estuvimos en la mejor disposición?, concluyó.
Antecedentes de un conflicto
El 22 de mayo del 2003 se empezó a generar polémica en torno al tema de la Feria.
En ese entonces diputados de oposición coincidieron en señalar que ?el gobernador Ángel Sergio Guerrero Mier incurrió en diversas irregularidades al celebrar el convenio para intercambiar cinco mil metros cuadrados de las actuales instalaciones de la Feria con varios particulares, a cambio de 40 hectáreas en donde se pretende edificar el nuevo espacio donde se celebrarán las fiestas de la ciudad?.
Para esas fechas y durante meses, la óptica de los diputados Rosario Castro del PAN, y Alfonso Mercado del PT, fue que el ahora ex mandatario realizó dicho compromiso de intercambio sin ponerlo a consideración del Congreso del Estado, como debió hacerse, dijeron.
Mientras tanto, el Gobierno sostenía que era una ?ganga? adquirir las 40 hectáreas rumbo al municipio de Mezquital a un precio de 15 ó 17 pesos por metro cuadrado.