Deben pasar tres meses sin lluvias y que éstas sean menores a la mínima histórica, afirman.
Pese al reclamo campesino acerca de las consecuencias de la sequía en el campo duranguense, la Comisión Nacional del Agua (CNA) dice que técnicamente no existe sequía en Durango.
Miguel Calderón Arámbula explicó que no se considera la existencia de este problema todavía, pues no se han acumulado tres meses seguidos con precipitaciones pluviales que oscilen 50 por ciento debajo de la media histórica.
Calderón, gerente regional de la CNA en Durango, incluso dijo que las expectativas de lluvia giran en torno a que se registren precipitaciones pluviales durante tres días en el mes de octubre, y en dos días más en el mes de noviembre, aunque reconoció que ya no servirían para los cultivos.
El secretario general de Gobierno, Ricardo Fidel Pacheco Rodríguez, por su parte indicó que no se ha detectado programa, dependencia o fondo federal que conceda apoyos emergentes para enfrentar la sequía, por lo que habrá necesidad de esperar a que termine el ciclo agrícola para inventariar los daños en los cultivos.
Mientras el reclamo de las organizaciones campesinas se agudiza, el funcionario estatal dice que se dificulta bajar recursos extraordinarios para atender la falta de agua que padecen los cultivos y la ganadería duranguense, en virtud de que no hay programas de Gobierno que atiendan la falta de agua en las cosechas.
Pacheco señaló que el Gobierno y las dependencias ligadas del medio rural en sus tres niveles están haciendo el estudio pertinente para encontrar la manera de bajar recursos; sin embargo, insistió que declarar zona de desastre en este momento no es la solución, ya que sería un trámite sin sentido y sin consecuencia favorable, al menos hasta ahora.
