EFE
LONDRES, INGLATERRA.- Es el sueño de cualquier niño, ser dueño de una fábrica de chocolate, y tanto les ha gustado la idea a los más pequeños que el jurado infantil de los premios de la Academia Británica de las Artes de Cine y Televisión (BAFTA por sus siglas en inglés) ha galardonado a la película Charlie y la Fábrica de Chocolate como la mejor película del año.
El filme, que trata la historia de un niño que escapa de su humilde existencia tras ganar una invitación a visitar una fábrica de chocolate propiedad de un excéntrico personaje, ha sido el más votado por los 32.000 niños que formaron el jurado infantil de la décima edición de los premios.
Charlie y la Fábrica de Chocolate, del realizador estadounidense Tim Burton, compitió con grandes producciones de elevado presupuesto como La Guerra de las Galaxias: Episodio III, La Venganza de los Sith y Batman Begins.
Este galardón es conocido como el BAFTA infantil porque es el único premio donde los niños deciden en lugar de los miembros de la Academia Británica.
En el BAFTA de los adultos la película que se impuso la pasada noche fue Los Increíbles, de John Walker. Para Anne-Marie Flynn, directora de los premios BAFTA, ?es interesante observar cómo los niños y los adultos han elegido cosas diferentes?, y añadió: ?creo que los adultos han valorado más la fabulosa animación y el trabajo artístico de Los Increíbles.
