Varios pasajeros pudieron abandonar la nave antes de que se incendiara y se partiera en dos.
Toronto (Canadá), (EFE).- Todos los pasajeros del vuelo 358 de Air France que se salió hoy de la pista y se incendió al aterrizar en el aeropuerto de Toronto están vivos y sólo catorce sufrieron heridas leves, informaron las autoridades canadienses.
En el avión accidentado, un Airbus A350, iban 297 pasajeros y 12 miembros de la tripulación, según informó Steve Shaw, portavoz de la Dirección de Aeropuertos de Toronto.
Las autoridades canadienses advirtieron, sin embargo, que aún no tienen confirmación absoluta de estos datos.
La nave se salió de la pista hacia las 16.03 horas (20.03 GMT), cuando efectuaba la maniobra de aterrizaje en medio de una gran tormenta y acabó en una hondonada a 200 metros, donde se partió en dos y se incendió.
El lugar del accidente está cerca de la autopista 401, que ha sido cerrada parcialmente, lo que ha ocasionado un gran congestionamiento de tráfico en la zona norte de Toronto.
Un pasajero que consiguió escapar del avión siniestrado, Olivier Dubos, dijo que justo antes de aterrizar, el avión iba extremadamente rápido y que, un minuto antes de tomar tierra, se quedó sin luz.
Dubos dijo creer que "todos los pasajeros están vivos y lograron escapar".
"Todo el mundo estaba aterrorizado", dijo Dubos, quien señaló que se hincharon las rampas de emergencia y con las indicaciones de los tripulantes, varios pasajeros pudieron abandonar la nave antes de que se incendiara y se partiera en dos.
Otro de los pasajeros que salieron con vida del aparato, Roel Bramer, aseguró a la cadena de televisión CNN que vio un rayo caer poco antes del siniestro, y confirmó que había salido del aparato por la rampa de emergencia.
Bramer dijo que las azafatas abrieron las puertas del avión antes de que se parase del todo y que él fue la segunda persona en salir del avión.
