Por Agustín Cabral Martell
TOMA DE DECISIONES EN LA APLICACIÓN DE LA
ÉTICA EN LOS AGRONEGOCIOS
Hay que considerar lo siguiente en la toma de decisiones cuando se va a aplicar la Ética en los Agronegocios:
Identificación del problema de la ética: el primer paso en cualquier decisión ética es identificar el problema. Dos factores en este proceso son la relevancia percibida del problema en la estrategia corporativa general y la intensidad o la necesidad percibidas para la resolución del problema que se presenta. Muchos obstáculos pueden impedir este proceso, como el pensamiento de grupo, que puede distorsionar las percepciones, de tal manera que la relevancia del problema se minimiza o se desecha por completo y la insensibilidad del grupo a las peculiaridades del problema. Esto último, a su vez, puede ser una función del desarrollo moral de los miembros del grupo.
Etapas del desarrollo moral: Kohlberg identifica seis etapas de desarrollo moral cognoscitivo del individuo, que idealmente madura hacia la etapa final durante su vida; las etapas pueden resumirse de la siguiente manera:
Etapas del desarrollo moral: el individuo ve la conducta correcta de manera simplista en cuanto a consecuencias negativas por mala conducta. La probabilidad de ser sorprendido por transgresiones y el castigo consecuente por desobediencia dictan el grado de obediencia, haciendo de esto un sistema ineficiente y muy poco confiable.
Reciprocidad: el comportamiento correcto se determina por un arreglo recíproco y mutuamente benéfico, en el que los intereses de cada parte se satisfacen de manera equitativa. La justicia tiene gran importancia en esta etapa.
Empatía: hay una identificación indirecta con las necesidades y los intereses de otros en esta etapa, de tal modo que la percepción del comportamiento correcto refleja sus necesidades e intereses.
Conciencia social: la esfera de la empatía se expande para incluir no sólo a otras personas específicas, sino a la sociedad o a la comunidad en su conjunto. Un rudimento de conciencia preliminar empieza a formarse en esta etapa.
Contrato y derechos sociales: un reconocimiento tácito o quizá explícito de la utilidad y la ventaja de derechos y contratos caracteriza a esta etapa. Los derechos, los valores y los contratos legales con la sociedad se reconocen como dignos de respeto y preservación.
Principios éticos universales: la esfera de los derechos individuales y las obligaciones hacia los demás se amplían para convertirse en la noción de los derechos universales inalienables y de los principios éticos. Se mantienen como verdaderos sin importar el reconocimiento de cualquier sociedad particular o cuerpo legislativo.
El papel de la cultura corporativa: el entorno moral corporativo prevaleciente puede afectar en forma significativa la toma de decisiones morales de los miembros de la organización. Por ejemplo, un empleado de un fabricante de equipo para acampar puede volverse más consciente del ambiente, como resultado de las campañas de la compañía que aumentan la ?conciencia ecológica?. Por el contrario, la cultura corporativa del crimen organizado puede fomentar y cultivar una ética de indiferencia insensible hacia la ley y la imposición de ésta.
Otras personas importantes: este grupo incluye a los compañeros, gerentes y subordinados de un empleado. De todas las personas en una jerarquía organizacional, los otros empleados importantes dentro del grupo de trabajo tienen el mayor impacto sobre las decisiones de un empleado. En el campo ético esto es en especial pertinente, puesto que las instrucciones, los memos y los seminarios de la alta gerencia pueden tener poco impacto, si los otros empleados importantes no están de acuerdo con dicha información.
Libre de responsabilidad: los empleados pueden sentirse exentos de responsabilidad del comportamiento no ético, en casos en los que siguieron instrucciones de jefes y gerentes. El grado en el que los subordinados tienen responsabilidad moral, por consecuencia de acciones no éticas llevadas a cabo por indicación expresa de sus superiores, es un tema difícil y complejo.
Incentivos y frenos: el comportamiento no ético puede fomentarse o desanimarse dentro de la cultura corporativa, mediante el sistema del reforzamiento positivo y negativo que funciona dentro de la cultura. Por ejemplo, si se hace una gran venta para la que se usa un sistema de sobornos y comisiones y el vendedor responsable de la práctica de negocios no ética no es reprendido, sino que se alaba, entonces el mensaje es implícito y claro: las prácticas no éticas se tolerarán (incluso se recompensarán) siempre que aumenten las ventas.
Factores externos que influyen en la toma ética de decisiones: incluso en casos en los que un empleado puede sentir inicialmente que son requeridos para cumplir instrucciones, el acatamiento puede racionalizarse debido a la influencia de factores externos; incluyendo una autoestima baja y la necesidad de encajar, la necesidad de aceptación, el temor de perder su empleo o el temor de que le asignen un puesto inferior o no lo promuevan.
Influencias interpersonales sobre la toma ética de decisiones: el conjunto psicológico del comportamiento interpersonal y de la interacción en la corporación tiene un papel clave para determinar la capacidad del individuo a fin de tomar decisiones éticas. Estos factores pueden organizarse mediante la dinámica de la interacción de grupo, así como analizarse las características individuales dominantes dentro del grupo.
