Las autoridades municipales de Durango capital tienen ante sí una dura prueba por superar: deben demostrar más allá de cualquier duda que las cantidades que “reparten” entre organizaciones y líderes -que sumaron en sólo dos meses más de tres millones de pesos- se encuentran plenamente justificadas y que existe un verdadero interés colectivo en la asignación de recursos públicos, del erario, en beneficio de particulares.
El alcalde y sus principales colaboradores deben satisfacer el legítimo reclamo de los ciudadanos que hoy cuestionan las razones por las cuales se “reparten” entre decenas de líderes de colonias, de sindicatos y hasta de asociaciones de padres de familia, cantidades que van desde los diez mil hasta los 150 mil pesos, sin que se justifique o compruebe documentalmente su destino final.
Hoy, los regidores panistas en la capital del estado, gracias a la normativa de Transparencia y Acceso a la Información, cuentan con una lista de 279 emisiones de efectivo por parte de las autoridades municipales y que tienen por destinatarios –a manera de ejemplo- al líder de la colonia La Virgen, con 30 mil 500 pesos; a Javier Guerrero Romero, de Proyección XXI, con 150 mil pesos, o bien, Guadalupe Silerio, sin que se especifique su representatividad, pero que se ve beneficiada con 50 mil pesos.
La regidora panista Claudia Hernández Espino tiene una petición: el alcalde Jorge Herrera Delgado debe explicar la causa de interés público, procedimiento y destino final de todas y cada una de las partidas, y los beneficiarios deben comprobar en qué se gastó cada centavo. La razón la asiste, ya que se trata de recursos públicos y ninguna autoridad puede disponer de ellos a su antojo.
Por el bien de todos, más vale que se trate de un error, de alguna “herencia” que se corregirá a la brevedad, ya que los tiempos en que una autoridad compraba la buena voluntad de los líderes sociales con dinero del erario, que aceptaba los chantajes o mantenía en paz a los especialistas en crear problemas mediante dádivas, hace años que quedaron atrás… ¿o no?