Los trabajos de ampliación a ocho carriles del Periférico han dado material para innumerables notas periodísticas, debido a múltiples errores y pifias realizadas a la par por autoridades y constructores.
El primer detalle surgió cuando a alguien se le ?olvidó? licitar un tramo de camino de aproximadamente 800 metros, que por mucho tiempo permaneció en el abandono. Durante un largo periodo nadie se hizo responsable del ?olvido? hasta que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes destinó seis millones de pesos extra para corregir ese pequeño detalle, en una obra cuya inversión rebasa los 160 millones de pesos y es construida bajo el programa Alianza Coahuilense.
La falta de vigilancia vial, la ausencia de puentes peatonales y de luminarias, han sido algunos de los errores señalados constantemente por El Siglo de Torreón. Sin embargo, llama la atención y preocupan las declaraciones de Félix Caldera Serrano, representante del Sindicato de Materialistas de Torreón CTM, quien afirma que en su mayor parte, los trabajos de ampliación del cuerpo central del Periférico fueron realizados con deficiencias, debido a que no hubo control de calidad ni supervisión externa, algunas empresas constructoras no retiraron la totalidad de los bancos de escombro que por años existieron ahí, a una profundidad de seis metros.
Esta situación generará problemas a la carpeta asfáltica con baches y ondulaciones en el pavimento, en una vialidad que tiene un aforo de aproximadamente 300 mil vehículos diarios, la mayoría de ellos, de carga pesada.
La anomalía tiene su origen, según el líder materialista, en que cuando en excavaciones hay necesidad del retiro de escombros, a las constructoras les cuestan más las maniobras ya que implican ?dobles viajes?? y la manera de ahorrarse es rellenando vacíos con escombro y tierra buena.
Ante estos señalamientos es urgente que las autoridades den una explicación, ya que se está haciendo ?costumbre? entregar obras de mala calidad a los torreonenses y como ejemplo se puede citar el Distribuidor Vial Revolución.