Determina el Gobernador Ismael Hernández Deras destituir de su cargo al director del Hospital de La Guajolota, luego de que un contingente de indígenas lo interceptara para denunciar los malos tratos que han recibido por parte de Rigoberto Castro Zúñiga.
En el marco de la toma de protesta de la nueva mesa directiva del Colegio Médico realizada en el Club Campestre, los indígenas arribaron a la par que los empleados inconformes del mismo nosocomio por el desempeño del citado galeno, a quien califican de déspota.
Desde antes de la nueve de la mañana el grupo se posó a las orillas de la carretera en espera de que llegara el mandatario estatal. Indígenas y trabajadores estaban en el área y hasta ellos arribaron Manuel Alonso Domínguez Padilla y Gerardo Quiñónez Canales, coordinador de Hospitales y director de planeación de la Secretaría de Salud (SSA) respectivamente.
Mientras los funcionarios dialogaban con los trabajadores en primera instancia, Santiago Calleros, comisariado ejidal de Santa María de Ocotán y Xoconoxtle expresó a los medios de comunicación que eran múltiples las quejas en contra de Castro Zúñiga, quien atendía a los indígenas de una forma inapropiada y por lo tanto, exigían respeto.
Como lo dio a conocer este medio de información en su edición del jueves 11 de agosto del año en curso, un grupo de cerca de 11 personas, entre estos personal del citado nosocomio así como pobladores de la comunidad indígena, revelaron su inconformidad por el trato que les brindaban.
Incluso, dos mujeres de la localidad, aseguran que Castro Zúñiga les amenazó de muerte porque hicieron pública su queja respecto a la atención brindada por él.
Luego de varias reuniones con Francisco Javier Solís Estupiñán, director de los Servicios de Salud Durango (SSD) no se llegó a un acuerdo. El viernes 12 del presente mes por la tarde, los denunciantes se entrevistaron con José Ramón Enríquez Herrera, secretario de salud pero tampoco hubo nada en concreto.
De esta forma, tanto los indígenas como los trabajadores optaron por buscar al Ejecutivo Estatal. Y si bien es cierto que a su entrada el ex alcalde de Durango pasó desapercibido por ellos, puesto que se encontraban con Domínguez Padilla y Quiñónez Canales, lograron su objetivo casi al medio día.
Los empleados se fueron con el Coordinador de Hospitales para revisar un expediente en la contraloría interna, que cabe mencionar, también fue señalada por actuar de manera parcial a favor de Castro Zúñiga. Pero los indígenas prefirieron esperar hasta cumplir su cometido.
Cuando el Gobernador salió del evento a bordo de su camioneta, los manifestantes llamaron su atención en la puerta del club. Una vez que se paró y salió de su vehículo le expresaron sus denuncias, haciendo énfasis en que dicho galeno no les respetaba y les brinda un mal servicio.
Calleros resaltó que no pedían que le quitasen su fuente de empleo, simplemente, que lo removieran a otra unidad. Tras escuchar las quejas, el Mandatario Estatal llamó a Enríquez Herrera para girarle la instrucción de que Castro Zúñiga ya no estuviera a cargo del Hospital.
También enfatizó que la investigación continuará y de comprobarse su culpabilidad recibiría la sanción correspondiente.
Por su parte, Enríquez Herrera se limitó a decir que en La Guajolota se ha reforzado la plantilla laboral con la integración de médicos tradicionalistas que sirven para romper las barreras que en muchos casos se ponen por parte de los indígenas debido a sus usos y costumbres.
PORMENORES
-Rigoberto Castro Zúñiga quedó a disposición de la Subdirección de Recursos Humanos de la SSA en donde se definirá su situación laboral con la dependencia.
-Tendrá que responder a los señalamientos que los representantes de la comunidad de Guajolota y localidades de zona de influencia expresaron.
-El Titular del Ejecutivo fue enfático al mencionar, que la separación de este funcionario, obedece por quejas interpuestas en diferentes instancias y que se da el incondicional apoyo a la sociedad.
-Se tomó la determinación de separar del encargo al citado médico, para no enrarecer más las inconformidades y de paso, entregar una muestra más de que la intención del Gobierno del Estado, es mantener la paz y concordia entre los habitantes de poblados y comunidades, en un afán de armonía entre los servidores públicos como lo es el este caso concreto, en los Servicios de Salud de Durango.
FUENTE: Comunicación Social Secretaría de Salud.