Existe hermetismo dentro del Centro de Rehabilitación Socia, en relación con los problemas internos que se vienen suscitando con los empleados de la mencionada institución, pues el director del Cereso, Oliverio Reza Cuéllar, negó que haya situaciones anómalas y posteriormente se contradijo diciendo que esos problemas se arreglan hacia el interior y no acostumbra ventilarlos a través del periódico.
El pasado lunes 9 de mayo, El Siglo de Durango fue testigos cuando se le negaba el acceso a uno de los empleados del penal, por parte del jefe de Vigilancia, Jaime Reséndiz Chávez.
Dentro de las investigaciones que realizó este medio de comunicación, se manejan varias versiones entre los diferentes empleados, argumentando que es posible que se les esté reprimiendo por insistir en un aumento de sueldo que no se da desde hace dos años.
Lo cierto es que el Director no está enterado de las atribuciones que se toma el jefe de Vigilancia de impedir el paso a algunos trabajadores o simplemente no quiere expresar los motivos por los que actúa de esa manera, de acuerdo con la declaración a este rotativo.
Los empleados del Cereso que fueron entrevistados en el marco de la visita del cardenal Norberto Rivera Carrera agregaron que al parecer no es la primera vez que hay la consigna de evitar el paso a empleados.
Señalaron que ya se ha exigido la renuncia de uno de los empleados, sin haber razón, pues en ningún momento se le presentó una carta de motivos para que dejara su cargo.
