Clientes y locatarios se acostumbraron al olor del drenaje en área de comida
Al entrar al Mercado Gómez Palacio se puede percibir un olor desagradable, principalmente en el área de comida, además de que algunas sobras de alimento así como desperdicios son arrojados por las coladeras, lo que provoca que muchas de ellas se tapen.
Existen goteras en diferentes puntos del mercado, lo cual afecta a algunos locales, ya que dañan la mercancía; tal es el caso del espacio ubicado debajo de la guardería, en donde se venden piñatas, las cuales se ven afectadas por esta situación.
Los contenedores de basura es otra problemática que se tiene, ya que Aseo Urbano envía dos o tres camiones por día debido a la cantidad de basura que se genera en este sitio, aunado a que muchos locales vecinos depositan los desechos en el mercado.
Se han realizado recorridos por el mercado para detectar las deficiencias que tiene, dice Antonio Murguía Corral, administrador del Mercado Gómez Palacio, ya que alrededor del 20 por ciento de las instalaciones se encuentran dañadas.
Este mercado tienen muchos años, comenta el Administrador del mercado, por lo que es necesario revisar las tuberías, el sistema de drenaje y el vital líquido, para en caso necesario enviar un reporte a Obras Públicas, o bien al Sistema Descentralizado de Agua Potable y Alcantarillado (Sideapa), según sea el caso.
En días pasados se detectó un problema de drenaje cerca de los comedores; sin embargo, fue reparado inmediatamente, ya que se recibió la queja durante la tarde y temprano por la mañana acudió el Sideapa a destapar la coladera. No obstante, las personas que tienen locales cerca se quejaban del mal olor que se produjo al destapar la coladera, señaló Murguía Corral.
Algunos resumideros empiezan a ser un peligro debido a la antigüedad que tienen, por lo que los mismos dueños de los locales solicitan que se coloquen tapas más resistentes para evitar accidentes y drenar más rápidamente los desperdicios.
Respecto de la iluminación con que cuenta el mercado no se tiene ningún problema, comentó Murguía Corral, ya que en cuanto se detecta una lámpara es reemplazada, además de que los pasillos son luminosos y cumplen con los requerimientos de locatarios y clientes.
El Mercado Gómez Palacio ya no tiene el movimiento de antes, opinó el administrador de este lugar, Antonio Murguía Corral.
En otros tiempos la gente acudía a esta vendimia a surtir frutas, verduras y demás artículos; sin embargo, desde que surgieron las tiendas de autoservicio cada vez es menor la cantidad de personas que acuden a realizar sus compras a este sitio, lo cual afecta a los locatarios.
Aún existen ancianas vendiendo hierbas y algunas de ellas se encuentran en el mercado desde sus inicios.
