A los municipios se les atiende vía telefónica, pues carecen de oficinas regionales
Citlalli Zoé Sánchez |
El Siglo de Durango
Con sólo cuatro verificadores la Profeco vigila que no se cometan abusos en contra de los consumidores en toda la entidad, además, carece de espacios de recepción de quejas en los demás municipios del Estado pues únicamente posee una unidad de servicios en la Comarca Lagunera.
Óscar Gómez Ramírez, delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) minimiza el hecho de que exista tan poco personal que garantice un buen desempeño comercial. Asegura que no se tienen problemas en la cobertura y que en el caso de las personas de otros ayuntamientos se les atiende vía telefónica o mediante operativos especiales.
El servidor público comenta que cuando se requiere, el jefe de verificadores y él mismo participan en los operativos. ?El Estado es algo grande y estamos tratando de cubrirlo dentro de nuestras limitaciones pero allí estamos?, expresa.
La Profeco es una delegación con poco personal ya que de acuerdo a lo establecido por el informante, tienen una plantilla laboral de 26 empleados.
Argumenta que sí tienen presencia en las demás zonas del estado ya que realizan recorridos de manera periódica. ?Tenemos coordinación con las presidencias municipales en las cuales nos apoyamos?, establece pero reconoce, que no tienen oficinas a las cuales las personas afectadas en esos sitios puedan acudir.
?Pero se puede apoyar vía telefónica y cuando vemos que hay una problemática se puede enlazar con nuestros operativos, cuando salen las brigadas a los municipios. Se acude a la comunidad?, asevera.
?Con la información que se nos dé por parte del consumidor, enlazamos vía telefónica una conciliación inmediata que lo contempla nuestra ley y por tal motivo, no es necesario que la persona se traslade a la capital?, indica.
La Profeco no ve afectada sus funciones al contar con cuatro verificadores, insiste el funcionario federal, pero acepta que es ?una limitante?. ?No estamos dejando de vigilar y de amparar a los consumidores, en virtud de que cuando hay un programa especial a eso están encaminados los esfuerzos?, subraya.
Gómez Ramírez expresa que con el motivo del 10 de mayo, fecha que genera una intensa actividad comercial ampliarán su horario de labores. ?Todo el personal va dirigido hacia esos negocios que se dedican a la venta de flores, dulces, regalos por un lado y por otro, a aquellos lugares a los cuales van a verificar básculas aprovechan para ir a dulcerías, confiterías y demás. Los programas están creados para no distraer a los verificadores sino hacia dónde está la necesidad del mercado?, explica.
?Como en cualquier otra dependencia hay a veces algunas carencias pero estamos redoblando esfuerzos, ya que inclusive estamos trabajando los sábados no obstante que no es un día normal de trabajo pero con la idea de cubrir la mayor parte?, declara.
Entre las faltas más comunes que cometen los comerciantesson está el no tener los precios a la vista del consumidor. ?En general son a los que se les aplican mayor número de sanciones y las cantidades son diferentes, pues la posibilidad económica de una miscelánea es diferente a una gasera?, dice.
ANEXO DE INFORMACIÓN
Cuide su economía
Para el ahorro del luz la Profeco recomienda:
-Revisar que la instalación eléctrica no tenga fugas.
-Nunca enchufar varios aparatos en un mismo contacto. Esto produce una sobrecarga que puede provocar un corto circuito.
-Monedas, alambres, papel de estaño o de aluminio jamás se deben utilizar en lugar de los fusibles.
-Sustituir focos incandescentes y los halógenos por lámparas ahorradoras que, en principio son más caras pero consumen cuatro veces menos energía y duran diez veces más.
-Limpiar periódicamente focos y lámparas pues el polvo bloquea la luz que emiten.
-Mantener abiertas las cortinas durante el día.
-Pintar las paredes y los techos con colores claros y brillantes, ya que éstos reflejan y distribuyen mejor la luz.
-Apagar los enseres que producen calor tales como planchas, pinzas para el cabello, parrillas eléctricas antes de terminar de usarlos, así se aprovecha el calor acumulado.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.