NUEVA YORK, NY.- La selección de futbol de Panamá, convertida en un ?Quijote? en la Copa Oro de la Concacaf, buscará hoy batir su último ?molino? camino de la gloria cuando enfrente por el título a Estados Unidos.
Para los panameños será la primera final en este torneo, al que llegaron como corifeos y van a salir por la puerta de las estrellas, aún cayendo ante los anfitriones, que buscan conquistar su tercer título en la competencia, la cual se inició en 1991.
Pocos pensaron en Panamá para la final, en un torneo donde estaba México, de buena actuación recientemente en la Copa Confederaciones en Alemania, o Colombia, que ha mejorado en las eliminatorias sudamericanas.
Eso sin contar a Estados Unidos o a sus vecinos centroamericanos Honduras, Guatemala y Costa Rica, de mayor tradición y nivel futbolístico que el equipo istmeño.
Sin embargo, no en el papel sino en el terreno, que es lo que importa, los panameños demostraron hambre de éxitos, técnica, trabajo de conjunto y capacidad goleadora.
Entre sus victorias, camino de la final, le propinaron dos derrotas a Colombia en dos estilos diferentes, una por 1-0, sabiendo mantener la ventaja con una férrea defensa, y la otra, en semifinales, en estilo de ida y vuelta, por 3-2, mostrando que saben llegar al área rival y anotar.
Panamá ya es más que los dos veteranos hermanos Julio César y Jorge Luis Dely Valdés, quienes aunque aún juegan su rol en la selección no son los únicos capaces de desequilibrar.
El arquero Jaime Penedo mostró que está a la altura de las mejores en este torneo y Luis Tejada y Ricardo Phillips, por mencionar a dos destacados, son jugadores a tener muy en cuenta por cualquier rival.
Si Estados Unidos quiere ganar la Copa Oro por tercera vez debe frenar el entusiasmo, la velocidad y el coraje de los centroamericanos.
Los anfitriones no podrán contar con su defensa Eddie Pope, lesionado, ni tampoco con su director técnico Bruce Arena, expulsado por protestar en la semifinal ante Honduras, partido que ganaron con apuros por 2-1 en los últimos cinco minutos.
El entrenador de los panameños, el colombiano Jesús ?Cheché? Hernández ha logrado transformar la mentalidad de sus dirigidos y hacerlos conscientes de que no tienen que sentirse en desventaja ante ningún oponente.
El gran ausente de este final será México, ganador en cuatro oportunidades de este torneo, que fue eliminado en cuartos de final por Colombia.
Listos para la fiesta
Panamá volverá a fijar su mirada en la televisión hoy siguiendo a sus nuevos ?héroes? de la selección de futbol, que disputarán de manera histórica la final de la Copa Oro contra el anfitrión y favorito Estados Unidos.
La actuación del equipo en el torneo de la Concacaf ha sido el centro de atención de los panameños que han pasado de una emoción a otra desde el inicio el pasado seis de julio.
Un sorpresivo triunfo 1-0 sobre Colombia en la jornada inaugural despertó a la ?marea roja?, como le llaman a los hinchas de la selección canalera, que estaba apagada por el pobre papel en el hexagonal de la Concacaf rumbo al Mundial Alemania 2006.
Luego vino un empate 2-2 con Trinidad y Tobago y derrota 1-0 frente a Honduras que le bastó a Panamá, que asistía por segunda ocasión desde 1993 a la Copa Oro, para avanzar por primera vez a la segunda fase del máximo torneo regional.
Las emociones comenzaron a superar las propias expectativas de los aficionados cuando Panamá, ubicada en el lugar 83 de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA), eliminó el 17 de julio a Sudáfrica (38 del mundo), en una dramática definición por penales inédita en la historia del balompié canalero.
Ese día comenzó a escribirse una nueva historia en el futbol del país y los nombres de jugadores como del portero Jaime Penedo y el goleador Luis Tejada empezaron a escucharse por todos lados, mientras llegaba el partido de semifinales contra Colombia.
Con el antecedente del juego inaugural, los panameños amanecieron el jueves pasado soñando con una nueva victoria frente a su vecina Colombia, número 25 en la clasificación de la FIFA.
La noche del jueves el país se paralizó por completo para ver el partido por televisión o escucharlo por radio, y las emociones llegaron a su clímax con cada uno de los tres goles con que Panamá derrotó 3-2 a Colombia para avanzar a la final.
Los aficionados panameños saltaron esa noche a las calles para celebrar el triunfo hasta altas horas de la madrugada, mientras el presidente Martín Torrijos felicitó vía telefónica a los jugadores en Nueva Jersey, sede del juego del jueves y de este domingo.
A partir de ese momento, la ?marea roja? ha alcanzado su máximo nivel convirtiéndose en el tema obligado a nivel nacional y se anticipa otra paralización a las horas de la final, con reuniones familiares y grupos en bares y discotecas para ver el partido.
Las madres, hermanas y otros familiares de los jugadores han aparecido en los medios locales relatando historias de los nuevos héroes, en su mayoría de orígenes humildes en barrios pobres de un país con un futbol semiprofesional.
La prensa deportiva y los aficionados en las radios comentan que están satisfechos con la labor del equipo sin importar el resultado ante Estados Unidos, número seis del mundo, que ha sido su verdugo dos veces en el último año.
?Ya para nosotros son campeones, lo que han logrado ha sido una gran hazaña que nos hace sentir agradecidos?, manifestó el mandatario, quien tampoco ha podido evitar la fiebre futbolística de los últimos días.
El del domingo será un clásico duelo de ?David contra Goliat? en el que los canaleros, con una modesta tradición en el futbol, intentarán revertir la historia de sus últimas derrotas frente a Estados Unidos.
El equipo norteamericano le empató a Panamá 1-1 a domicilio en el tiempo de reposición en un juego de la ronda semifinal de la eliminatoria mundialista de la Concacaf en septiembre de 2004, y luego en octubre la vapuleó 6-0 en la ?vuelta? en ese país.
Los dirigidos por el técnico Bruce Arena asestaron su último golpe a la escuadra del colombiano José Hernández el pasado 8 de junio en esta capital con un triunfo 3-0 que hundió a Panamá en el sótano del hexagonal final de la Concacaf.
Eso desanimó a la marea roja que veía alejarse la Copa del Mundo al ubicarse Panamá último en el grupo con dos puntos, superado por México con 13 unidades, Estados Unidos (12), Costa Rica (siete), Guatemala y Trinidad y Tobago (cuatro).
La selección había viajado a la Copa Oro con el primer objetivo de ?fortificarse? -como dijo su técnico- de cara a la segunda fase del hexagonal que se reanudará el 17 de agosto cuando los canaleros visitarán a Guatemala.
El papel en la Copa Oro les ha devuelto esperanzas a los aficionados para el resto de la eliminatoria y planean demostrarlo la noche del lunes, cuando está programado un recibimiento al equipo en el Estadio Rommel Fernández de esta capital.
Un sueño cumplido
Retornó a lo grande a la selección junto a su hermano gemelo, pero sólo él cumplirá uno de sus ?principales sueños?. Jorge Dely Valdés vestirá de nuevo la camisola de Panamá que enfrentará hoy a Estados Unidos en la final de la Copa Oro.
Para Panamá será su primera final en la octava edición de la Copa, en la que jugó como los grandes teniendo al frente de ataque a Jorge y su hermano gemelo Julio, que regresó a su país por motivos personales.
?He estado muchos años con la selección y me siento muy satisfecho por acompañarlos en este momento más importante de Panamá. Sin duda que ésta es mi mejor experiencia a nivel de selección?, declaró Jorge.
El delantero aseguró a que ?a Panamá le ha salido prácticamente todo como lo planeó en este torneo, pero ahora falta culminar con broche de Oro y ganar por primera vez la Copa?, agregó.
?Estoy muy feliz de estar aquí, de formar parte de este momento tan especial que está viviendo la selección. Llegamos hasta la final con mucha humildad y con el deseo de alcanzar más y más?, agregó.
Jorge y su hermano gemelo Julio, de 38 años, piezas clave del esquema ofensivo de Panamá en las últimas eliminatorias, se habían retirado desde noviembre de la selección, pero retornaron para la Copa de Oro.
?Una de las razones del retiro fue porque nosotros estamos haciendo un documental de nuestra vida deportiva y no nos permitía estar con la selección?, explicó.
Los hermanos Dely Valdés comenzaron a jugar al fútbol desde los ocho años en la escuela Porfirio Meléndez en la ciudad de Colón e inspirados por su hermano mayor Armando, que militó con clubes de Argentina y Uruguay, quien murió en agosto del 2004.
A los 16 años debutaron en el Atlético Colón de la liga mayor. Posteriormente iniciaron su carrera internacional en clubes de Argentina, Uruguay, España y Japón, entre otros países.
Jorge dijo que tras culminar la Copa de Oro, el objetivo es clasificar a Panamá al mundial del 2006.
Ante el llamado de la afición y los federativos, su hermano Julio se incorporará al seleccionado que en agosto enfrentará de visita a Guatemala, en la recta final de la Confederación de Norte, Centroamérica y del Caribe de Futbol Asociación (Concacaf, por sus siglas inglés).
A cinco fechas por culminar la eliminatoria final de la Concacaf, Panamá está en el sótano con dos puntos. México está al frente con 13 seguido de Estados Unidos con 12.
A la cancha
Las posibles alineaciones para el partido que se disputará hoy desde las 15:00 hora del este de Estados Unidos (14:00 Tiempo de La Laguna) en el estadio de los Gigantes en East Rutherford, cerca de Nueva York, son las siguientes:
Panamá:
Jaime Penedo.
Carlos Rivera.
Ubaldo Guardia.
Anthony Torres.
Felipe Baloy.
Alberto Blanco.
Gabriel Gómez.
Ricardo Phillips.
Julio Medina III.
Luis Tejada.
Jorge Dely Valdés.
DT: Jesús Hernández.
Estados Unidos:
Kasey Keller.
Jimmy Conrad.
Oguchi Onyewu.
Frankie Hedjuk.
Pablo Mastroeni.
Chris Armas.
John O?Brien.
Steve Ralston.
Damarcus Beasley.
Josh Wolff.
Landon Donovan.
DT: Bruce Arena (suspendido).
