Tal y como estaba programado, los cinco aspirantes a la candidatura presidencial del PRI e integrantes del grupo llamado Tucom (Todos Unidos Contra Madrazo), realizaron en Guadalajara el primer foro para exponer ideas y consolidar una oferta alternativa a la del actual líder de su partido. En términos llanos, una pasarela que no logró el impacto mediático que anhelaban, pero que sirvió para evaluar qué armas porta cada quién a estas alturas de la pre-precampaña... y están muy parejos.
Para los gobernadores de Coahuila y el Estado de México, Enrique Martínez y Arturo Montiel; los ex gobernadores de Tamaulipas e Hidalgo, Tomás Yarrington y Manuel Ángel Núñez y el senador Enrique Jackson, es imperativo el recomponer la relación entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, evitar que en el futuro el presupuesto se decida en litigios, la reelección de alcaldes y legisladores, la rendición de cuentas y la transparencia y, por supuesto, un ataque frontal contra el crimen organizado. En suma, los miembros del Tucom ofrecen lo que es propio y natural a una campaña electoral: abatir rezagos, solucionar problemas y crear mecanismos para que todo marche bien.
El mandatario coahuilense propone además, facultar al Instituto Federal Electoral para conducir procesos internos de partidos y reducir el número de diputados en la Cámara Baja, mientras que Yarrington propone una suerte de tolerancia cero a la delincuencia organizada. El senador Jackson señala por su parte que es vital el no tolerar impunidad, corrupción ni privilegios. Un poco más de buenas intenciones.
En el aspecto estrictamente político, los cinco aspirantes aprovecharon la oportunidad para hacer pedazos a la administración de Vicente Fox, a la que acusaron desde no mantener el clima de gobernabilidad, hasta de ineficacia de su operación política, pasando por los “pendientes” y la cuestionable actuación de Santiago Creel en su paso por Gobernación. En fin, fue la primera de cinco reuniones y como de los hombres que aspiran a gobernar el país lo menos que se puede esperar es aprendizaje, queda esperar que la próxima les salga mejor.
