MEXICO, DF.- Atención Yanquis de Nueva York, Lakers de Los Ángeles y Pieles Rojas de Washington. Los campeonatos no se ganan desembolsando grandes cantidades, si no, pregúntele a los protagonistas del próximo Super Bowl.
El secreto del triunfo, según pueden revelar Águilas de Filadelfia y Patriotas de Nueva Inglaterra, está en el talento juvenil, el buen ojo para el draft y un entrenador de calidad. Ambas escuadras han seguido estos parámetros desde hace tiempo, mantuvieron la calma y hoy, cualquiera de ellos, se encuentra a un triunfo de la gloria.
En total, 17 de los 25 titulares (incluyendo al pateador) de los Patriotas fueron tomados en el draft o llegaron como novatos al equipo, como el caso de Adam Vinatieri, quien fue un agente libre novato en 1996 y les ha dado dos anillos de Super Bowl con goles de campo de último minuto.
Por su parte, las Águilas jugaron ante los Halcones de Atlanta con 15 jugadores de cantera, entre los que se destacan su quarterback, ambos receptores, el ala cerrada, corredor y fullback, en camino a su primer aparición en el Super Bowl desde 1981.
Patriotas ha diseñado la escuadra que está a un paso del bicampeonato en base al draft, de donde han salido sus principales armas como Tom Brady (2000), Daniel Graham, Deion Branch y David Givens, todos seleccionados en 2002. Fue en ese mismo año, cuando Filadelfia armó la base del equipo actual tomando en el draft a Brian Westbrook, corredor, así como a los esquineros Lito Sheppard y Michael Lewis (ambos invitados al Pro Bowl) y el profundo Sheldon Brown.
Sin embargo, por más que ambos tengan al draft como arma principal, también han requerido de la agencia libre para dar el paso al siguiente nivel, especialmente Filadelfia. Las Águilas tuvieron que desembolsar una buena cantidad de dólares para romper con la mala racha de tres finales de la NFC de forma consecutiva, al adquirir a Jevon Kearse, estelar defensivo, los linebackers Jeremiah Trotter y Dhani Jones, vía agencia libre; a Terrell Owens, receptor, vía un cambio con Baltimore. Inversiones que finalmente le dieron resultado.
Mientras tanto, Patriotas sólo tuvo una adición de peso para el 2004, y ni siquiera tuvo que invertir mucho, pues Corey Dillon, quien terminó tercero en yardas por tierra, llegó a los campeones en un cambio con Cincinnati por una segunda selección colegial.
Es por eso que el Super Bowl tendrá un sabor especial para cada uno de sus participantes, pues el amor a la camiseta estará en juego para muchos, que nunca han vestido otro jersey en la NFL.