Qué importante es tener el ?don? para saber escuchar. Cuántos dolores de cabeza y amargas experiencias podemos evitar simplemente con seguir las indicaciones que se hacen, no sólo para beneficio de la mascota sino también para la familia. Desafortunadamente los perros o gatos no pueden decirnos, ?ya es hora de mi medicina? o ?es fecha de mi vacuna?.
Las clínicas veterinarias entre otras funciones cuenta con los servicios de estética, se podría decir que hoy en día es una de las actividades más solicitadas para las mascotas.
En una ocasión llegó a corte de pelo ?Chica? una perrita cruza de maltés de cuatro años de edad aproximadamente, la habían recogido sus propietarios de la calle hace tres años, ellos la alimentaban y se quedaba en el jardín de la casa.
Al momento de estar cortando el pelo repentinamente empezó a convulsionarse, durando un tiempo de tres minutos aproximadamente para su recuperación, al terminar de cortar el pelo ?Chica? no presentó ningún otro comportamiento extraño.
Al regresar sus dueños para recogerla se les informó sobre el problema de la perrita, respondieron que jamás la habían visto convulsionar. Se hizo una serie de recomendaciones y que no dejaran de informarme si volvía a presentarse algún problema.
A la siguiente semana llevaron a ?Chica? a consulta, presentando un estado de desnutrición y deshidratación extremo, pues no bebía ni comía alimento alguno. Aparentemente parecía un problema de gastroenteritis, pero no se descartaron otras enfermedades, pues su expediente no tenía vacunas aplicadas en la clínica, la única con que contaba era la de rabia, haciéndolo en la campaña de vacunación del centro antirrábico.
Los propietarios no la dejaron internada en la clínica y se la llevaron a casa con el suero administrándolo por vía endovenosa, además de otros medicamentos.
A los dos días recibí la llamada telefónica de su dueña, ?Chica? había fallecido, se escuchaba consternada y también quería saber qué hacer con el cuerpo de su mascota.
En estos casos por lo regular recomendamos la cremación, pero les sugerí que la llevaran al centro antirrábico para su estudio, ya que había presentado signos nerviosos debido a sus convulsiones sin causa alguna y era importante descartar rabia mediante el laboratorio.
Afortunadamente se siguieron las indicaciones al pie de la letra y se pudo evitar un desenlace de pronóstico grave. ?Chica? salió positiva a rabia.
Inmediatamente los dueños de la perrita me preguntaron: doctor ¿es necesario que nos vacunemos?, y continuaron con una serie de dudas sobre la enfermedad que todo mundo teme. Les informé que existe por parte del centro antirrábico el servicio de epidemiología, ellos hacen las recomendaciones e indican a qué personas le aplican la vacuna antirrábica de acuerdo a una serie de estudios que realizan.
Afortunadamente los veterinarios dedicados a perros y gatos, estamos consciente del continuo riesgo a que nos exponemos con el manejo diario de animales, pues no todos son muy amigables y no estamos exentos de una que otra mordida, así que nos aplicamos la vacuna antirrábica periódicamente. Es bueno aclarar que la vacuna antirrábica de ?Chica? no falló, lo que sucede es que no todos los organismos responden a la producción de anticuerpos vacunales.
Después de unos días, llegó una señora que también nos lleva a sus mascotas a vacunas y a estética y es amiga de la dueña de ?Chica?, naturalmente ya sabía sobre el desenlace fatal de la perrita. Al verle entrar a la clínica se me hizo raro que no llevara a sus mascotas, y me dijo muy consternada, ¿doctor, se me puede contagiar la rabia si mi amiga tomó de mi refresco?
