EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Cuando realizaba las faenas propias del hogar, Catalina Franco Vargas comenzó a tener problemas de salud, por lo que fue auxiliada por su esposo, quien de inmediato la trasladó al Centro de Salud de Nazas pero debido a su gravedad fue llevada hasta la clínica en Rodeo, muriendo en el trayecto de un coma diabético.
Nadie esperaba este desenlace, pues el día comenzó como cualquier otro, Catalina, de 52 años de edad, se levantó a temprana hora el pasado viernes para iniciar sus labores cotidianas en su hogar ubicado en el ejido Lázaro Cárdenas, municipio de Nazas, Durango.
Alrededor de las 11 horas, tras preparar lo necesario para la comida, la mujer comenzó a sentirse mareada, pero aún así continuó con su trabajo hasta que minutos después su condición comenzó a empeorar.
Para Tomás García Campos, de 61 años de edad, esposo de Catalina, no pasó desapercibido la palidez que denotaba el rostro de su mujer, por lo que rápido se aprestó a darle ayuda, llevándola al Centro de Salud de Nazas, donde luego de una evaluación, los médicos determinaron la necesidad de trasladarla al Hospital General de Rodeo, Dgo.
A bordo de una ambulancia, Catalina llegó a la clínica en mención pero ya sin vida, por lo que se le dio aviso a Jaime Álvarez Morales, agente del Ministerio Público, quien se constituyó en el lugar para dar fe del cadáver y ordenó lo llevaran al anfiteatro para la necropsia de Ley.
De acuerdo a los resultados del estudio realizado por el médico legista, Alejandro Ramírez Amador, Catalina Franco Vargas, murió a consecuencia de un coma diabético.
