Viena, (EFE).- Los perfumes sexuales no sólo influyen en el comportamiento sexual sino que pueden determinar también lo que compran los hombres, según han descubierto unos científicos expertos en mercadotecnia de la Universidad de Viena.
En las pruebas realizadas en cobayas humanos, éstos tuvieron que valorar unas revistas llevando una máscara impregnada de un olor sexual sintético, que en su forma natural ante todo forma parte del sudor de las axilas en el hombre y que supuestamente atrae al otro sexo.
Según el autor del estudio, Claus Ebster, las personas que participaron en el ensayo mostraron la inclinación a enjuiciar positivamente las revistas y estaban más dispuestas de lo normal a comprarlas.
Lo "asombroso" del caso, advirtieron los científicos, es que el "gancho" olfativo vale tan sólo para los hombres y su efecto se manifestaba principalmente cuando se trataba de revistas típicas para hombres, como las dedicadas al motor o a la vestimenta masculina.
Cuando se trataba de productos con imágenes de mujeres semidesnudas, el efecto resultó contrario y los hombres, bajo el influjo del perfume, realizaron comentarios más bien negativos.
Las mujeres, a las que debía dirigirse el olor, no se dejaron influir en absoluto en su juicio ni en lo que querían comprar.
Según Ebster, esas materias olorosas podrían ser aplicadas en el futuro en las mercancías y los comercios destinados particularmente al hombre para aumentar las cifras de ventas, mientras que su efecto en lo sexual, por ejemplo cuando se usan en los perfumes, es aún muy discutido.