EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Las investigaciones continúan y la información no circula. Personal de la Procuraduría General de la República, (PGR) prefiere no emitir datos sobre las indagatorias en el asesinato del agente del Ministerio Público (MP) de la Federación, Jesús Reyes Espino.
Personas que laboran en la PGR que prefirieron el anonimato, aseguraron que ya se han hecho declaraciones a varias personas, entre ellos algunos policías y gente que aparece como testigo del día en que desapareciera el funcionario.
Además señalan que uno de los puntos negativos en la investigación, es que Reyes Espino tenía poco tiempo como agente, diez días, por lo que no se conocen sus antecedentes ni otros aspectos que pudieran ayudar a establecer una línea.
El 24 de febrero pasado por la noche, el recién nombrado agente del MP presuntamente fue “levantado” por algunas personas, para luego asesinarlo y dejarlo envuelto sobre una colchoneta con un mensaje intimidatorio.
Sin embargo, nada quisieron informar sobre los avances de la investigación, argumentando que sin soporte jurídico no se podían hacer especulaciones sobre los resultados hasta el momento, porque existe la posibilidad de que se obstruya el trabajo de los involucrados.
Además se confirmó que el hijo de Jesús Reyes Espino, de nombre Vicente, acudió de inmediato a las oficinas de la PGR para interponer la denuncia por secuestro y no por desaparición, como se había manejado en algunos medios de comunicación.
Aunque hasta el momento poco ha sido lo que se ha informado, las autoridades federales confían en que se puedan acotar todos los medios necesarios para llegar a una aclaración del crimen para luego presentarla a los medios de comunicación.
La desaparición de Reyes Espino ocurrió en las calles Urrea y Auza cuando al parecer el agente del MP salía de un billar cuando de pronto fue sorprendido y “levantado”. Aún se desconoce si el crimen tiene tintes del crimen organizado.
