LIMA, (Reuters).- La campesina peruana Elizabeth Coz mordió tan fuerte los genitales de un hombre que intentó violarla, que los médicos no tuvieron otra opción que extirparle un testículo, informaron la policía y otros funcionarios.
"Parecía mordida de perro. El hombre llegó con el testículo derecho necrosado pendiendo de un hilo, fue mordido desde la raíz hasta la bolsa, no quedó más remedio que cortárselo", dijo el cirujano Hugo Jaime del hospital Regional de Huánuco.
El hecho ocurrió en un pueblo alejado de la región andina de Huánuco, 450 kilómetros al noreste de Lima, cuando Hermógenes Meza llegó con 10 compinches a un caserío para robar ganado e intentó violar a Coz, pero ella forcejeó y lo mordió.
Un oficial de la policía de Huánuco dijo que 11 ladrones entraron a robar en la noche. "Aprovechando la poca luz, uno de ellos trató de violar a Coz y ella se lanzó sobre él y lo mordió ahí abajo", agregó.
Coz no fue arrestada porque "actuó en defensa propia y se comprobó que querían robarle y violarla", añadió el oficial.
