El Consejo de Seguridad de la ONU pidió ayer un informe urgente del secretario general sobre “las circunstancias, causas y consecuencias” del asesinato del ex primer ministro libanés Rafik Hariri, y Estados Unidos demandó la inmediata retirada de las tropas sirias de Líbano.
Una declaración aprobada por los 15 miembros del Consejo llamó al Gobierno libanés a “llevar ante la justicia a los perpetradores, organizadores y patrocinadores de este acto terrorista atroz”.
El consejo expresó su extrema preocupación por el posible impacto del asesinato en los actuales esfuerzos del pueblo libanés por solidificar la democracia y subrayó que “el acto terrorista” no debe poner en peligro los comicios parlamentarios próximos.