EL SIGLO DE TORREÓN
CD. LERDO, DGO.- El diputado federal, Fernando Ulises Adame de León, propuso un punto de acuerdo en la tribuna del Congreso de la Unión para que, de manera inmediata, el Ejecutivo a través de la Comisión Nacional del Agua aporte todos los elementos técnicos y jurídicos necesarios para que a la brevedad se resuelva el procedimiento que otorgó el Juzgado Tercero de Distrito de La Laguna para la suspensión temporal de las obras de construcción de la presa El Tigre en San Juan de Guadalupe, Durango.
?Y para que a la brevedad se apliquen los recursos que han sido destinados para este propósito en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2005 para la continuación de la obra?, señaló el legislador.
El pasado cuatro de agosto, se llevó a cabo esta propuesta, ya que San Juan de Guadalupe, es un pueblo añoso localizado en el semidesierto del estado de Durango, en uno de los sitios más secos del país.
Es un municipio clasificado como de alta marginalidad, con pocas posibilidades de desarrollo y como muchos municipios de la región, con una tasa de crecimiento poblacional negativa, es decir, se está quedando sin habitantes.
Ya no tiene los minerales que tenía hace 100, 200 ó 300 años. Ni una ganadería y ni siquiera mediana, por falta de pastizal o arbustos y su agricultura es muy precaria por falta de tecnología y particularmente, por falta de agua.
En el municipio, hay mil 500 hectáreas de medio riego. No hay riego completo para los más de 550 productores de la zona. El agua del Aguanaval se utilizó como hasta ahora, siempre que el río tiene sus avenidas esporádicas y comúnmente el producto de la agricultura no sirve más que para el autoconsumo. ?No se pude garantizar una buena cosecha, mientras no se tenga garantizada el agua en el momento que el cultivo lo demanda. Actualmente, se tiene agua cuando escurre por el río, no cuando se necesita?.
Legalmente, los agricultores de la región tienen derecho a utilizar estos escurrimientos. El presidente Calles en 1929 firmó el primer decreto y Cárdenas en 1938 les concede por decreto el derecho a usar poco más de 13 millones de metros cúbicos de agua procedente del Aguanaval, por año. Por Ley, estos agricultores tienen derecho.
?Demandaron ante CNA la construcción de una presa almacenadora en el arroyo Del Tigre, afluente del Aguanaval, de 14 millones de metros cúbicos, con una capacidad útil de 12 millones. La capacidad de retención de agua es menor al volumen que tienen concesionado. Es menos agua, para la misma tierra, pero con la posibilidad de regular su aplicación?, apuntó el legislador.