Luis Enrique Benítez Ojeda, secretario de Desarrollo Social del Gobierno del Estado, presentó una ponencia en el marco de la Mesa para la Reforma Político-Electoral, a través de la cual plantea la necesidad de implementar un nuevo método para elegir a los diputados del Congreso del Estado, que consiste en la elección por el principio de primera minoría.
Benítez Ojeda destacó que la reforma electoral debe partir de la premisa de que es indispensable establecer nuevos y mejores criterios de equidad y legalidad, tratando de introducir elementos correctivos en función de la necesidad de establecer también mejores criterios de equidad y certidumbre entre los partidos políticos.
Se pronunció en favor de formas más eficientes de organizar y dirigir las actividades relativas a la puesta en marcha del proceso electoral, todo esto con el fin de lograr estándares mayores de gobernabilidad, de mejor representación política y de participación.
?Comúnmente la representación por mayoría y la representación proporcional han sido definidas de la siguiente manera: se habla de representación por mayoría cuando el candidato es elegido en las urnas; mientras la representación proporcional se da cuando la representación política produce resultados electorales que otorgan a cada partido un peso proporcional al número de votos obtenidos?, expuso.
?En Durango, ese mismo principio de mayoría es válido en 15 distritos que se ganan por el sistema de mayoría, y diez escaños por el principio de representación proporcional. Pero? ¿qué sucede con las minorías, es decir, aquéllas que votaron por un determinado candidato que no logra obtener la mayoría relativa, y que obtiene un segundo lugar en preferencias? Esa minoría de ciudadanos no está representada, por lo que falta equidad en el sistema electoral?, agregó.
En este contexto, puntualizó que la elección de diputados por el principio de minoría ?nos posiciona con un sistema electoral de vanguardia y las ventajas son muy claras?.
A decir de Benítez, permitiría la real representación del electorado que no logró la mayoría, es decir, la minoría electoral estaría debidamente representada; ?se acabaría con la constitución de minorías parlamentarias demasiado artificiales, que no corresponden verdaderamente a una minoría real electoral, sino a los intereses de las dirigencias de los partidos?.
Benítez Ojeda señaló que, según la fórmula de representación proporcional, el hecho de ganar o no un escaño depende de la proporción de votos que obtengan los partidos políticos, con base en sus candidatos propuestos.
Los partidos que hayan sido capaces de conseguir la cantidad necesaria de votos serán elegidos, pero es totalmente inequitativo que logren escaños personas con base en los votos que obtienen los candidatos que son derrotados en las urnas.
?Es decir, la representación proporcional es una forma artificiosa y perversa, pues se nutre y alimenta de la votación obtenida por los candidatos que en la lucha no obtuvieron el triunfo, y se pretende que los diputados electos conforme al principio de representación proporcional sean el reflejo de las fuerzas sociales y grupos políticos de la población, lo cual es falso, pues en realidad los candidatos que lograron quedar en primera minoría son quienes realmente representan esos grupos y fuerzas sociales?, concluyó.
