El político tabasqueño considera acudir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para evitar que proceda el proceso de desafuero.
MÉXICO, D.F., (SUN-AEE).- Andrés Manuel López Obrador, jefe de Gobierno del Distrito Federal, no descartó la posibilidad de acudir ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), para protestar en caso de que proceda su desafuero y la demanda penal por la presunta desobediencia judicial en el predio El Encino.
Empero, el funcionario confió en que ninguno de los procesos se concretará.
El político tabasqueño consideró que "desde luego hay que acudir a todas las instancias", para evitar que proceda, en su caso, el proceso de desafuero.
No obstante, explicó que para recurrir a la CIDH, tiene que ser después de que se cometa la presunta violación y "se pasan los tiempos", señaló.
En su habitual conferencia de prensa, insistió en que debe haber una reforma constitucional para que no se suspendan los derechos políticos de indiciados, sino que eso ocurra hasta que haya una sentencia.
Aseguró que en todos los países y en la Carta Internacional de los Derechos Humanos, suscrita por diferentes naciones, no está considerada esa posibilidad, es decir, el protocolo establece que sólo se deben perder los derechos políticos cuando hay una sentencia.
López Obrador destacó que continuará en la fuente del gobierno capitalino durante el 2005 y no quiso hacer señalaciones en torno a su eventual candidatura presidencial para 2006. Por lo pronto, anunció que este año continuará con la gira a diferentes entidades de la República Mexicana para promocionar su libro "Un proyecto alternativo de nación", por lo que este mes acudirá a Chiapas, Baja California sur, Guanajuato y Yucatán.