El director responde a la Corte en Londres desde un hotel en París.
Reuters
LONDRES, INGLATERRA.- La vida personal de Roman Polanski quedó al descubierto ayer, al comienzo de un juicio por calumnias en el cual el director testificó a través de una videoconferencia desde París, evitando los riesgos de extradición a Estados Unidos, donde está acusado de abuso a una menor.
Polanski demandó a los editores de la revista Vanity Fair por un artículo publicado en julio de 2002 que decía que había coqueteado con una mujer sueca en un restaurante de Nueva York de camino al funeral de su mujer Sharon Tate, asesinada en Los Ángeles. El cineasta negó el incidente.
El máximo tribunal de Gran Bretaña concedió a Polanski el derecho a seguir su proceso desde Francia y evitar el riesgo de extradición a Estados Unidos, donde está acusado de abuso sexual a una menor.
"Usted es un fugitivo de la moralidad", dijo el abogado Thomas Shields, representante de la compañía editora de Vanity Fair, Conde Nast.
El director de cine, de 71 años, admitió haber practicado "sexo casual" con otras mujeres antes y durante su matrimonio con Tate, además de una vez cuatro semanas después de su asesinato, y también reconoció haber tenido sexo al menos una vez con dos mujeres al mismo tiempo, una de ellas de 15 años.
"Lo pone de una manera grotesca", respondió Polanski, antes de que el proceso fuera pospuesto hasta el martes.
Polanski ha sido requerido en Estados Unidos después de declararse culpable en 1977 de tener relaciones sexuales con una joven de 13 años. El director se escapó a Francia antes de que se pronunciara la sentencia.
El realizador, que ganó el Oscar a mejor director por El Pianista en 2003, nunca ha vuelto a Estados Unidos o a Gran Bretaña y si fuera a Londres para interponer las acciones legales podría enfrentar una posible extradición. Sin embargo, desde su Francia natal no puede ser extraditado.
Los abogados de Polanski dijeron que se trataba de la primera vez que una persona realizaba una demanda a través de una conexión de video.
En el juicio, el cineasta se ahogó de la emoción al describir su amor por Tate, asesinada en 1969 por seguidores del clan de Charles Manson estando embarazada de ocho meses y medio.
"Sharon era dulce, radiante, brillante. Tenía un gran sentido del humor (...) Ante mis ojos, era la mujer perfecta", dijo.
Un pasaje del artículo de Vanity Fair, reproducido en los documentos de la Corte en febrero, citó a Polanski prometiendo a la "belleza sueca": "Voy a hacer otra Sharon Tate de ti".
Sobre el artículo, Polanski dijo que "estaba en estado de shock (...) Esto fue lo peor que han escrito jamás contra mí.
Es absolutamente falso. Pero pienso que fue particularmente dañino porque deshonra mi recuerdo de Sharon".
Ambos lados del caso aceptan ahora que el cineasta no estaba en el restaurante de camino al funeral de Tate, pero que estuvo allí unas tres o cuatro semanas después de su muerte.
Durante la audiencia, Polanski defendió su promiscuidad después de su relación con Tate.
"La muerte de Sharon (...) fue un shock inconmensurable para mí, y en esos momentos algunas personas se vuelcan a las drogas, otras al alcohol o van a un monasterio. Para mí fue el sexo", sostuvo el director de Chinatown.
Se espera que la actriz Mia Farrow junto con Deborah Tate, la hermana de la difunta esposa de Polanski, declaren hoy.
El director de cine, quien escapó de las fuerzas alemanas cuando era un niño en Polonia y cuya madre murió en un campo de concentración, vive en París con su esposa, la actriz francesa Emmanuelle Seigner.
DEFIENDE SU NOMBRE.
El realizador Roman Polanski, prófugo en EU y con una peculiar relación con la justicia, declaró vía satélite desde Francia a una corte británica contra la revista Vanity Fair, a la que acusa de difamación.
-Una vez más, el caso sienta un inusual precedente, nota común en la vida y la carrera del cineasta nacido en Francia hace 71 años.
-El autor de Rosemary?s Baby, Chinatown o The Pianist, por la que recibió un Oscar al mejor director, es un superviviente de los campos de concentración nazis, donde perdió a su madre.
-Polanski perdió en agosto de 1969 a su segunda esposa, Sharon Tate, en uno de los crímenes más sangrientos de Hollywood, cuando la actriz -embarazada de ocho meses y medio- y cuatro amigos, fueron asesinados en un crimen ritual perpetrado por la "familia Manson".
-Además, el realizador reside desde hace más de 25 años en Francia, a donde huyó de la justicia estadounidense tras declararse culpable de mantener relaciones sexuales con una menor en 1977.
-Su carrera marcó una nueva peculiaridad al prestar testimonio vía satélite desde un hotel en Francia en el juicio que mantiene en los tribunales británicos contra la revista Vanity Fair.
-La publicación estadounidense con difusión internacional publicó en julio de 2002 que el director había intentado ligar con una "belleza sueca" en un restaurante neoyorquino de camino al funeral de su esposa asesinada. Según la revista, el realizador le dijo: "Haré de ti otra Sharon Tate".
-Su testimonio ?vía satélite?, inicialmente fue rechazado en corte, y sienta un precedente legal duramente criticado, ya que permite a Polanski hacer uso del sistema legal británico sin aceptar sus consecuencias.
-Tanto el abogado de Polanski en Londres como el propio realizador han insistido en que los dos casos son independientes.
-El realizador, casado en la actualidad en Francia con la actriz Emmanuelle Seigner, ha recurrido con anterioridad al uso de las conexiones de televisión vía satélite, pero nunca en temas legales.
-Polanski hizo una extensa promoción de su filme "The Pianist" de este modo, hablando con la prensa y con otros profesionales como el Sindicato de Directores de Hollywood en una inusual campaña promocional para su película con la que finalmente consiguió el Oscar durante una ceremonia en la que su ausencia fue notable.
-Durante su campaña al Oscar, Polanski hizo la misma petición, ser juzgado por su obra, no por su pasado.
FUENTE: EFE