EL SIGLO DE TORREÓN
Cd. Lerdo, Dgo.- Por el descuido y la falta de riego, en los últimos años han muerto 262 árboles en el Vivero de Lerdo, y según Ramón Cardoza Leguizamo, titular de la Dirección del Medio Ambiente, no es factible rehabilitar el pozo de agua.
“Un árbol no se muere de un año para otro, es todo un proceso para que muera por sequía, además había una densidad muy alta, la mayoría fueron eucaliptos y éstos requieren mucha agua, y entraron en una competencia por el líquido a consecuencia del desabasto”.
A decir del funcionario, ya se realizó un estudio y no es posible rehabilitar el pozo, pues está fracturado y sería muy costoso: “se tendría que perforar de nuevo, por otro lado el aforo es muy pobre, así que no es conveniente”.
A principios de año, el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Lerdo (SAPAL), realizó los estudios de factibilidad del pozo de San Fernando III, e incluyó el del Vivero: “se determinó que no es costeable intentar echarlo a funcionar”.
Ramón Cardoza Leguizamo señaló que, en esas condiciones, el pozo necesitaría mucha energía y en consecuencia generaría un gasto extraordinario, por eso el Ayuntamiento tiene contempladas otras alternativas para regar los árboles del Vivero de Lerdo.
Una de ellas, es utilizar aguas grises en las principales áreas verdes de Lerdo, “la conexión limítrofe de Gómez Palacio y Lerdo, la cuestión es bajar la línea de la tubería y poderla acercar para regar el Vivero, el bulevar Miguel Alemán, la plaza principal y la plazuela”.
Así, dijo, ya no sería necesario regar con líquido potable. Las aguas grises que en la actualidad se usan, son donadas por empresas privadas. Según el funcionario, “bajar” la conexión de la limítrofe costaría alrededor de 700 mil pesos.
Además, el Ayuntamiento también aprovecha las aguas de riego a través de pipas, el Vivero se anegó lo suficiente como para poder esperar que la Comisión Nacional del Agua abra las compuertas nuevamente.
