Las tarjetas de crédito y débito son aplicadas en operaciones de valor medio en México
Agencias
MÉXICO, DF.- A pesar de la importancia creciente que ha adquirido el dinero electrónico, el dinero “tangible” (billetes y monedas), aún desempeña y lo hará por muchos años, un papel predominante en las economías por las grandes ventajas que representa el uso de efectivo.
La proliferación de máquinas expendedoras y otros equipos que funcionan con monedas, así como el elevado uso que se hace de los cajeros automáticos para retirar efectivo, son indicios del enorme peso que el dinero “tangible” conserva en el total de las transacciones monetarias que se realizan en México.
El uso de billetes y monedas prevalece en operaciones de monto pequeño y en las que requieren cierta confidencialidad, mientras que las transferencias electrónicas y cheques se usan en operaciones de alto monto o grandes distancias y las tarjetas de crédito y débito para concretar pagos de valor medio.
“Por estos factores, es posible pronosticar que el dinero tangible va a seguir usándose durante muchos años”, establece un estudio del Banco de México (Banxico). Refiere que al utilizar los nuevos medios de pago (plástico y electrónico), la gente suele tener mayor dificultad para administrarse, para estar al tanto de las cantidades que gasta, del dinero que necesita ahorrar y pierde de vista el esfuerzo laboral que hay detrás de su salario.
Por el contrario, el efectivo tiene varias ventajas, como el que la transacción se mantiene en el anonimato, ya que algunas personas incurren en gastos que prefieren mantener en secreto, además es un medio de aceptación universal y sin límites establecidos por terceros.
Asimismo en el momento de la operación, el comprador se libera de toda obligación y de cobros posteriores y no tiene necesidad de firmar o esperar autorización para aplicar el cargo correspondiente.
Aunado a que “cuando se tiene contacto con un medio de pago palpable, el individuo se encuentra en mejor posibilidad de entender cabalmente lo que ese dinero significa en términos de lo que cuesta ganarlo, de su monto y de cómo lo distribuye en sus gastos”, señala el banco central.
En el documento “La Distribución de Moneda en México”, destaca que, lejos de desaparecer, los billetes y monedas más bien tienden a modernizarse y en los últimos años se han introducido nuevos metales y tecnologías para su acuñación.
Electrónico
Además, las transformaciones que hoy vive el dinero, no sólo implican cuestiones tecnológicas, sino que influyen en la forma en que éste se comporta y funciona, toda vez que grandes volúmenes de dinero en movimiento son absorbidos por el dinero electrónico.
Al respecto, algunos estudios demuestran que durante la década de los noventa, el vertiginoso aumento en Estados Unidos de la cantidad de operaciones realizadas a través de medios electrónicos de pago, correspondió a un pronunciado crecimiento del número de personas en quiebra.
Se observó que al tener menor contacto con el efectivo, el consumidor adopta una actitud más laxa (relajada) respecto de sus gastos, aunque sabe que el dinero viene y va, no lo puede ver durante estos procesos. Otra desventaja del dinero de plástico y electrónico, es que no obstante el elevado número de tarjetas de débito que existe en el país, infinidad de comercios carecen de las terminales necesarias para recibir pagos electrónicos.
Por otra parte, ciertas variantes para la venta de bienes y servicios, como son los mercados o el transporte público, por sus características y porque por frecuencia el monto de las operaciones en reducido, presentan dificultades particulares para ser integrados a la red electrónica.
“Sería sin duda una tarea de dimensiones titánicas dotar de terminales lectoras de tarjetas a todas las unidades de transporte público, pequeños comercios o puestos de periódicos en el país y en todo caso, parece poco probable que ello suceda en un futuro cercano”, resalta el documento.
Así, lejos de negar la importancia creciente que ha adquirido el dinero electrónico, es necesario reconocer sus desventajas. Entre ellas, la frecuente limitación a un monto mínimo de compras o la susceptibilidad de esos medios a manipulaciones criminales.
También debe admitirse que son usuales las dificultades técnicas o “fallas del sistema” por las que, incluso en aquellos establecimientos comerciales que cuentan con la terminal idónea, se imposibilita en un momento dado el uso de un monedero electrónico o de una tarjeta de débito.
Así, si bien en la actualidad el dinero “tangible” comparte el escenario económico con otros medios de pago, aún desempeña y lo hará por muchos años, un papel predominante”.
Atraen a mexicanos
Cada vez son más los bancos de Arizona que tratan de acaparar la atención de los mexicanos que diariamente cruzan la frontera para depositar sus ahorros o hacer inversiones en instituciones financieras.
Diana Brawn, portavoz del US Federal Reserve Bank en Washington dijo que en los últimos diez años se ha duplicado el número de bancos estadounidenses en la frontera con México.
“Las instituciones bancarias se han dado cuenta del potencial del inversionista mexicano”, dijo Brawn.
La historia de recesiones económicas ha originado que los mexicanos busquen en los bancos de Estados Unidos estabilidad económica, ya que sus pesos convertidos en dólares mantienen o incrementan su valor con el tiempo.
La especialista en finanzas dijo que los bancos en la frontera ya no sólo buscan al mexicano que abre pequeñas cuentas de ahorro o de cheques, sino aquellos que buscan la compra de propiedades a través de préstamos hipotecarios o futuros negociantes que planean abrir negocios propios o invertir en la bolsa de valores.
Un ejemplo de esto es Wells Fargo, institución financiera con más de 120 años de servicio al público y que hace tres años estableció una oficina para clientes internacionales en Arizona, especializada solamente en dar servicio al inversionista mexicano.
Alicia Vázquez, vicepresidente de Servicios a Clientes Internacional de Wells Fargo en Tucson, Arizona, dijo que el mercado mexicano es de suma importancia para ellos. Aunque el US Federal Reserve Bank no cuenta con un récord específico de las transacciones y depósitos monetarios de mexicanos, sí cuenta con un reporte mensual de las cantidades de dinero extranjero en bancos estadounidenses.
De acuerdo a este informe, en los últimos doce meses en instituciones bancarias en Estados Unidos se encontraban invertidos 28 mil 229 billones de dólares en moneda extranjera.
El US Federal Reserve Bank calcula que más de la mitad de todos los depósitos en bancos de la frontera sur, provienen de México.
Los mexicanos también son la fuente de más de 30 billones de dólares en inversiones de bienes raíces, especialmente en ciudades fronterizas.
“Mucha gente de las familias más acaudalas de Sonora, México, tienen casas o terrenos en Tucson o en ciudades como Scottsdale”, dijo Francie Merryman, vicepresidente de Northern Trust Bank, quien se especializa en clientes interesados en bienes raíces.
