Problemas de salud mental ligados a la depresión, un verdadero desafío pastoral: Solís Quiroga
El Siglo de Durango
El problema del suicidio en Durango se ha convertido en un reto pastoral para la Arquidiócesis local, afirmó tajante el sacerdote Víctor Manuel Solís Quiroga.
Víctor Solís, vocero de la Arquidiócesis de la Iglesia Católica en Durango, dejó claro que el suicidio es un problema de salud mental, aunque puede ser atendido por la vía espiritual y religiosa, ya que evidencia el gran vacío en que viven muchos duranguenses.
El clérigo no quiso entrar a la reflexión de si es o no alarmante la cifra de 79 suicidios reportados como tales en lo que va del año en la entidad duranguense, ya que afirmó que para la Iglesia es igual de preocupante la muerte de una sola persona con estas características.
Lo que sí ubicó preocupante es que se han generalizado cada vez más los problemas de salud mental ligados a la figura médica de la depresión, por lo cual insistió que el tema representa un verdadero desafío pastoral.
El padre Solís consideró necesario ir a la gente que se siente sola, ?a esos hombres que se están aislando a sí mismos y que los está enajenando hasta del principio de Dios, que es la vida?.
En tal sentido, explayó que el principal reto de la comunidad católica duranguense es llevar la alegría de vivir a quienes se encuentran en estado grave de depresión y soledad, así como promover en la sociedad duranguense una cultura de la vida.
Lo anterior ?precisó- implica denunciar la cultura de la muerte, que es ?la cultura de la violencia, de los vicios, aquella que nos lleva a despreciar la vida?.
?... Con que perdamos a uno de los fieles bajo esos parámetros nos preocupa y debe ser preocupante para toda la sociedad?, abundó Solís Quiroga, quien es el párroco del templo de Santa Ana.
Dijo que aún así, la cifra que hoy reportan las estadísticas locales de suicidio deben ser un especie de termómetro de que algo está diciendo, de que algo está ocurriendo entre la sociedad duranguense.
Por último, el declarante manifestó que los hechos ocurridos hasta el momento reflejan que, probablemente, ?nuestras emociones como sociedad se están enfermando, o quizá están ya enfermas y han alcanzado cada vez más un alto nivel?.
Estadísticas
Sobre el suicidio en Durango, realmente son datos que causan preocupación, como sucede en el primer semestre del 2005...
En enero se registraron siete casos de suicidio. Las víctimas fueron en su mayoría hombres y las edades fluctuaron de los 14 a los 58 años. La depresión fue la constante en seis de los siete casos.
En febrero se reportaron cinco casos. Las víctimas fueron cuatro hombres y una mujer, con edades de entre 13 y 49 años. La depresión imperó en tres de los cinco sucesos.
En marzo se reportó el menor índice mensual, con cuatro casos. Todos fueron varones con edades de 24 a 27 años. La constante generalizada fue de nuevo la depresión.
En abril se disparó la cifra a siete nuevamente, cinco hombres y dos mujeres, con edades de entre 18 y 49 años. Todos por depresión.
En mayo se tiene el registro de seis suicidios, todos varones de 12 a 65 años; todos por depresión.
En junio las autoridades supieron de 13 casos, sólo uno de ellos donde la víctima fue mujer. Las edades fluctuaron de los 14 a los 85 años. A todos se les ubicó bajo el motivo mismo de la depresión.
FUENTE: Estadísticas de la Procuraduría de Justicia del Estado.
