EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Posesión y comercio de droga, así como portación de arma de fuego, son los delitos federales en los que incurre un porcentaje considerable de menores infractores, que son atendidos en el Consejo Unitario de Menores (CUM).
Alejandra Calderón Flores, secretaria de acuerdos del CUM, informó que los casos del fuero federal representan el 23 por ciento del total de 65 procedimientos radicados del primero de enero al cuatro de agosto de 2005.
Casi el 90 por ciento de los delitos son cometidos por varones, de entre 13 y 15 años, considerando que la edad para los menores infractores en la vía federal es de 11 a 17 años.
Focos rojos se detectan en colonias como San Joaquín, La Durangueña, Las Carolinas, Zaragoza Sur y la Braulio Fernández Aguirre, asentamientos de donde proviene la mayoría de los infractores, indicó Alejandra Calderón.
En el diagnóstico del estudio socioeconómico que se hace a los menores detenidos, por la Policía Preventiva, o por la Policía Ministerial, vía orden de presentación, se detecta que la gran mayoría proviene de hogares desintegrados.
Calderón Flores aseguró que algunos son huérfanos o están al cuidado de sus abuelos, ya que sus padres se van a trabajar a Estados Unidos y tardan un buen tiempo en regresar.
Además, está claro que los distribuidores de droga, acostumbran utilizar a los menores de edad para entrar su mercancía, porque piensan que un niño tiene menos dificultad para recuperar su libertad, pero ante eso, el CUM se enfoca a dar un tratamiento y atención integral conforme a la Ley.
Durante 2004, el CUM radicó 135 expedientes, es decir, se atendió igual número de casos por delitos cometidos por menores y que están contemplados en el Código Penal, en los cuales puede presentarse uno o más detenidos.
El balance anual permite detectar que al cuatro de agosto, se mantiene la media de casi 11 casos al mes, con el agregado de que no han figurado delitos sexuales como la violación, únicamente, algún caso de atentados al pudor.
Los delitos del orden patrimonial, en todas sus modalidades, son los más frecuentes que se atienden la mayoría de las veces en la Unidad de Prevención y Atención de Menores Infractores, ubicada en un despacho adjunto a los módulos de detención de la Policía Preventiva.
Robo a negocio, a casa habitación, a persona o accesorios de vehículo, son los más recurrentes, junto con los daños causados a través de la manifestación del ?graffiti?.
Cuidado con las armas.
La secretaria de acuerdos del CUM, Alejandra Calderón, señala que otro de los factores que alertan a las autoridades, es la proliferación de armas de fuego, en poder de algunos menores y citó el caso del homicidio ocurrido el primero de enero de 2005, donde un niño de 15 años figuró como el presunto responsable.
Fue José Antonio (N), quien resultó ser el presunto autor de la muerte de José Luis Rivera López, de 19 años ultimado de un balazo en el pecho, la madrugada del primer día del año, en la colonia Carmen Romano.
Fue Yolanda Ezqueda Moreno, agente del Ministerio Público de delitos contra la Vida y la Salud Personal, mesa uno, coordinación A, quien tomó conocimiento del caso y al comprobarse su edad, las diligencias fueron turnadas a la Unidad de Prevención y Tratamiento de Menores Infractores.
Sobre el crimen se informó en su momento que José Luis vivía en la calle Cayetano Espinoza número 570, de la colonia Carmen Romano, y recibió el impacto en la mitad del pecho y aunque pudo ser trasladado de inmediato a la Cruz Roja, no resistió la mortal herida y al llegar al puesto de socorros dejó de existir.
Alto riesgo.
Los estudios psicosociales aplicados a menores infractores, encendieron focos rojos en las colonias:
San Joaquín.
La Durangueña.
Las Carolinas.
Zaragoza Sur.
Braulio Fernández Aguirre.
FUENTE: Consejo Unitario de Menores
