EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- “La poesía es un artículo de primera necesidad, lástima que mucha gente no lo asuma así”, afirma el poeta Eduardo Langagne.
El escritor presentará su libro Décima Ocasión mañana jueves a las 8:30 de la noche, en las instalaciones del Instituto Coahuilense de Cultura (Icocult) Laguna, ubicadas en avenida Juárez y calzada Colón.
Langagne, quien en 1980 se convirtió en el primer mexicano en obtener el Premio Casa de las Américas de Cuba, aborda en este nuevo trabajo aspectos de la vida cotidiana como la música, la comida, las tradiciones o la compañía de los amigos. Para ello, se vale de una forma ágil que invita al ingenio, a la improvisación y al canto: la décima.
El autor explica en los siguientes versos su inclinación por este ejercicio que da título al libro: “La décima es tradición/ de nuestra habla popular/ y sirve para cantar/ o improvisar la canción./ Es cumbre de la creación/ porque parece sencilla/ y quien lo intenta se pilla/ los dedos tras de la puerta;/ el alma nunca está muerta/ cuando en la décima brilla”.
Nacido en 1952, Eduardo Langagne ha obtenido reconocimientos como el Premio Nacional de Poesía Aguascalientes en 1994, la más alta distinción en certámenes poéticos en México y que han obtenido autores como José Emilio Pacheco, Eduardo Lizalde y Elías Nandino, entre otros; o el Premio Nacional de Letras Ramón López Velarde y el Gilberto Owen en 1991.
Además se han publicado traducciones, estudios y referencias críticas a su trabajo en países como Bélgica, Brasil, Bulgaria, Canadá, Cuba, España, Estados Unidos y Francia.
Su obra abarca poemarios como Donde Habita el Cangrejo (1980), Para Leer Sobre un Tambor (1986), A la Manera del Viejo Escarabajo (1991), Tabacalera (1992), Como Calles Estrechas (1994), Cantos Para una Exposición (1995), La Manzana en la Cabeza (2000) y Decíamos Ayer… (antología 1980-2000); y libros de narrativa como Cebolla de Cristal (1997).
Además tiene estudios de música y cine, es profesor de portugués, coordinador de talleres literarios y traductor. Ha sido reportero, redactor y editor de diversas publicaciones y suplementos.
En la presentación de Décima Ocasión -editado por el Icocult Laguna en colaboración con el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente (Iteso)- acompañarán a Eduardo Langagne la promotora cultural Gabriela Nava Femat y el etnomusicólogo Gonzalo Camacho.
Si la décima es tradición, en este poemario Langagne aclara que es también renovación constante y práctica que se cuestiona a sí misma, según refiere en Preguntas a los Decimeros y Trovadores: “¿Qué quieren nuestras canciones? ¿Nuestra jarana qué quiere? ¿Y nuestra voz qué prefiere?¿Qué son pues las emociones/ que nacen de tantos rones,/ tanto amor desmenuzado? Pues si el tiempo ha comenzado/ a exigir de otra manera, esta tradición trovera/ cantando se ha renovado.”
Con décimas cantó don Vicente Espinela, con décimas ensalzó Sor Juana a la Marquesa de La Laguna, con décimas forjó Violeta Parra un libro prohibido durante la dictadura de Pinochet en Chile y con décimas se enfrentan los trovadores de la Huasteca.
Ahora, las décimas ganan nuevos espacios que van del Internet al noticiero, de la selva al disco compacto. Por eso, se invita al público en general a asistir a la presentación de esta Décima Ocasión con Eduardo Langagne. La cita es a las 8:30 de la noche, en las instalaciones del Icocult Laguna. Y, por supuesto, el día diez.
¿Qué es la espinela?
Uno de los recursos más usados en la décima es la espinela.
-Llamada así por su inventor, el español don Vicente Espinel, consiste en estrofas compuestas por diez versos de ocho sílabas que riman en consonante, y cuya estructura es abbaaccddc.
-Se hace el “planteamiento” en los cuatro primeros, que terminan en punto. Siguen los versos complementando la idea que se resuelve en los dos últimos.
-En la espinela los ocho primeros versos traen la idea y la desarrollan, terminando en punto y los versos nueve y diez son como un corolario, una sentencia, que se deriva del pensamiento de los ocho anteriores.
-Todo depende del decimista y hay variaciones aceptadas, dependiendo del planteamiento o idea.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón
