La infraestructura del Centro de Desarrollo Comunitario Oriente del DIF Estatal se encuentra en malas condiciones; además, al carecer de una barda perimetral apropiada, sus instalaciones son presa fácil de los pandilleros, quienes se introducen para dañar el inmueble con graffiti.
En un recorrido realizado por El Siglo de Durango se pudo constatar que este Centro dependiente cuenta con un amplio espacio para desarrollar diferentes actividades tanto recreativas como deportivas; incluso, cuenta con una alberca y un pequeño gimnasio. No obstante, existen serias deficiencias.
Tableros de basquetbol sin su respectivo aro, las porterías de las canchas están viejas y oxidadas pero en especial, en el caso de los baños de las mujeres, las instalaciones son antiguas y sin lámparas. En todas las paredes existen muestras de los ?cholos? que con pintura hacen rayones o dibujos.
Ramiro Soto Contreras, director del Centro, acepta que el lugar requiere rehabilitación integral dado que se trata de un edificio antiguo. Además, el alumbrado tampoco funciona de manera óptima. No obstante, asegura que ya se tienen algunos programas para mejorar el sitio.
Comenta que carecen de una barda que proteja el Centro y, por lo tanto, los pandilleros pueden entrar de forma sencilla y para sacarlos deben acudir a la fuerza pública. Declara que hasta el momento no han sido objeto de ningún robo, pero los pandilleros en ocasiones optan por molestar a las mujeres que van a hacer ejercicio.
?Continuamente estamos retirándolos (a los pandilleros) pero ellos se hacen entrada a como dé lugar. La tela ciclónica perimetral la abren con pinzas; incluso, traen su herramienta para cortarla. Vamos, la cosemos con alambre y más tardamos en hacerlo que cuando ya están adentro otra vez?, reconoce.
Expone que en esta dependencia atienden a mil 100 personas que asisten a los diferentes talleres que imparten, así como a las actividades deportivas.
Dado que un importante número de duranguenses se reúnen en esta zona, el Centro se encuentra a su máxima capacidad. El entrevistado añade que cuenta con una plantilla laboral de 35 personas, entre instructores y personal administrativo que atiende al millar de usuarios.
?Este Centro es el más grande que tiene el sistema DIF Estatal; sin embargo, su infraestructura ya está a su máxima capacidad. Inclusive, las áreas deportivas que tenemos al aire libre también se saturan y por la antigüedad de la pintura ya es necesaria una rehabilitación total?, comenta.
Hace algunos años intentaron hacer una extensión del Centro en la Colonia Hidalgo y obtuvieron buenos resultados, pero por algunos problemas de arrendamiento cerraron el lugar. ?Se tiene la intención por parte de los directivos de abrir uno más en la Colonia 5 de Mayo y otro en la Colonia Hidalgo; de esa manera nos estaríamos ampliando?, agrega.
PRIMEROS ORÍGENES
El edificio que alberga el Centro de Desarrollo Comunitario Oriente tiene una antigüedad aproximada de 30 años. La historia que se transmite de generación en generación cuenta que primero se usó como una especie de cuartel. Posteriormente fue utilizado por la Secundaria ?Pensamiento Liberal? como aulas, mientras les construían sus espacios educativos.
Después fue retomado por el Gobierno del Estado para poner en marcha un programa denominado ?Deporte para todos?. Terminado este ciclo, en la administración estatal encabezada por Maximiliano Silerio Esparza, el espacio sirvió para implementar ?Casa DIA (Desarrollo Integral del Adolescente)?.
Luego fue una extensión del programa de PAMAR y desde hace cinco años funge como centro de desarrollo. Talleres de cocina, belleza, productos de cantera, ejercicios aeróbicos, tae kwon do, atención médica, estancia infantil, entre otras cosas, son los servicios brindados.
Ofrece actividades para todos los grupos de edad, desde bebés hasta ancianos. El objetivo es que las personas se capaciten para desempeñar alguna actividad productiva.