Un tribunal de La Haya condenó a 15 años de cárcel al empresario holandés Frans van Anraat por crímenes de guerra, esto en complicidad con el régimen de Saddam.
Bagdad, (EFE).- El asesor de Seguridad Nacional iraquí, Muafaq Al Rubai, anunció hoy, viernes, que alrededor de 50 mil soldados de la Coalición Internacional liderada por EU abandonarán Irak durante el próximo año.
En una entrevista concedida a la televisión local "Al Iraquiya", el responsable de la Seguridad iraquí dijo, asimismo, que cerca de siete mil 500 soldados norteamericanos se retirarán de territorio iraquí en las próximas semanas.
"Durante el próximo año, más de 50 mil soldados de la fuerza multinacional abandonarán Irak, con lo que su número se reducirá a menos de 100 mil. La retirada será entre enero y diciembre de 2006", señaló.
Rubai dijo que el acuerdo se alcanzó tras "una largas, amplias e intensas negociaciones entre el Gobierno iraquí y la coalición multinacional", y se enmarcó en un programa dirigido a que "las fuerzas iraquíes se hagan con el control total de la seguridad del país tras la retirada".
"Creemos que el Ejército y la Policía iraquí están preparados para asumir parte de las responsabilidades de seguridad" que en estos momentos tienen las fuerzas multinacionales, subrayó Rubai.
"La situación en el país es mucho mejor, además poseen el número suficiente, el equipamiento y la instrucción necesaria para que pueda producirse una retirada gradual de la coalición multinacional, primero de las provincias, después de la ciudades y por último de todo el país", apostilló.
Las declaraciones de Rubai coinciden con la visita no anunciada que este viernes realiza a Irak el secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld.
El responsable norteamericano visitó una base militar cerca de la conflictiva ciudad de Faluya, uno de los feudos de la insurgencia, donde además de felicitar la navidad a los soldados confirmó el pequeño repliegue de las tropas de su país
Rumsfeld subrayó que, gracias al progreso en el entrenamiento de las fuerzas locales, el Ejército estadounidense podría retirar dos brigadas de combate a principio de año, al tiempo que aumentar el número de instructores.
El responsable de la cartera de Defensa no facilitó una cifra, pero las brigadas en las Fuerzas Armadas de EU suelen estar integradas por unos cuatro mil o cinco mil soldados.
Este repliegue parece responder, sin embargo, a la retirada de las tropas extra enviadas al país durante los meses previos para garantizar la seguridad en las elecciones.
EU mantiene unos 138 mil soldados en Irak desde la invasión del país, cifra que en los últimos meses se había elevado hasta llegar a 160 mil.
Sobre la posibilidad de que, tras la futura retirada, el Pentágono deje una base permanente en Irak, Rumsfeld no descartó la idea pero subrayó que debe ser negociado con el próximo gobierno iraquí.
Rumsfeld también anunció que la Primera Brigada de la Primera División de Infantería no se desplegará en este país y que la Segunda Brigada de Primera División Blindada esperará como fuerza preventiva en Kuwait.
Condenan a cómplice de Saddam
Un tribunal de La Haya condenó hoy a 15 años de cárcel al empresario holandés Frans van Anraat por crímenes de guerra presuntamente cometidos en la década de los ochenta en Irán e Irak, pero le absolvió del cargo de genocidio.
La fiscalía le acusaba de complicidad en genocidio con el régimen del depuesto dictador iraquí, Saddam Hussein, al que, según la acusación, Van Anraat facilitó materias primas para fabricar armas químicas utilizadas por Irak durante la guerra contra Irán (entre 1980 y 1988) y contra la población kurda del norte de Irak, lo que causó miles de víctimas civiles.
El tribunal de La Haya dictaminó que la fiscalía no pudo demostrar que el empresario holandés, de 63 años, era consciente de la finalidad última para la que fueron empleadas las armas químicas.
Sin embargo, los jueces consideraron probado que Van Anraat sabía que las toneladas de materias primas que suministró al régimen iraquí entre 1984 y 1988 se emplearían en la elaboración de armas químicas como el gas mostaza.
Van Anraat es el primer ciudadano holandés condenado por crímenes de guerra cometidos por el régimen de Saddam Hussein.
También es el primer ciudadano de esa nacionalidad que ha sido acusado de complicidad de genocidio por presunta colaboración con el ex dictador iraquí, quien a su vez está siendo juzgado en Irak por los mismos crímenes.
En una vista que duró aproximadamente dos horas y media, los jueces leyeron su sentencia, que argumenta que la venta de toneladas de materias primas por parte del empresario holandés al régimen del ex dictador era merecedora de una condena de 15 años de cárcel, la máxima pena que la legislación holandesa prevé para los casos de crímenes de guerra.