PRONÓSTICO | DE NO REFORMAR EL RÉGIMEN DE PENSIONES Y JUBILACIONES, EN 15 AÑOS ÉSTE SERÁ INOPERANTE
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El sector privado señala que “no se esperan grandes avances, ni propuestas que liberen al Seguro de sus ataduras”
México, DF.- El sector empresarial del país advirtió que de no resolver en forma sensata la problemática financiera del IMSS procedente del Régimen de Jubilaciones y Pensiones (RJP), en 15 años ese instituto de salud estará imposibilitado para seguir sus operaciones.
A menos de una semana de que se venza el plazo promovido por el presidente Vicente Fox para que autoridades del IMSS y líderes sindicales propongan una solución para evitar la bancarrota del instituto, el sector privado advirtió que "no se esperan grandes avances, ni propuestas que liberen al Seguro de sus ataduras".
En el documento sobre el RJP del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado dijo que el principal problema con las obligaciones de pago es que pronto esa dependencia no podrá cumplir su función de proveedor de servicios de salud.
Actualmente el gasto en el RJP es casi cuatro veces mayor que el de inversión y es un poco mayor (mil millones de pesos) que el costo en medicamentos y material de curación. "La repercusión de la deuda contingente en el servicio médico es inminente", advirtió.
Pese a ello, las negociaciones de las autoridades del IMSS con el Sindicato Nacional de los Trabajadores del Seguro Social han sido ríspidas y poco visionarias, mostrando renuencia a afrontar la latente bancarrota del IMSS, señaló el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado.
Desde el año pasado, los nuevos trabajadores tendrán que jubilarse en los términos que manda la Ley del Seguro Social, pero con una pensión mayor. La propuesta presentada la semana pasada consiste en aumentar 16 mil plazas este año y contemplar la creación de hasta 65 mil plazas.
Los trabajadores en activo tendrán que aumentar sus aportaciones en uno por ciento anual hasta alcanzar diez por ciento de su salario, mismo que se incrementará en cuatro por ciento. Con estas medidas, señaló el organismo, es inminentemente que no se resuelve el problema del IMSS.
Según proyecciones con datos del instituto, con la nueva propuesta se logrará que el porcentaje del gasto en el RJP financiado por trabajadores en activo aumente de siete por ciento a 15 o 16 por ciento. Esto aliviará temporalmente las obligaciones del IMSS-Patrón, pero sigue siendo insostenible, afirmó.
Se prevé que el gasto en RJP en diez años se duplique debido a que la gran mayoría de trabajadores contratados en el expansivo sexenio de José López Portillo cumplirán los años de jubilación.
Sin embargo, la siguiente semana vence el plazo promovido por el presidente Fox para que las autoridades del IMSS, con los líderes del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social propongan una solución a la eventual bancarrota del instituto.
"No se esperan grandes avances, ni propuestas que liberen al Seguro de sus ataduras. No se espera que CFE y Pemex (Petróleos Mexicanos) sigan su ejemplo para que los pasivos laborales del Gobierno Federal, que hoy ascienden a 64.3 por ciento del PIB, disminuyan", señaló.
Estiman crecimiento
El superávit fiscal propuesto por el Ejecutivo Federal al Congreso de la Unión como parte del paquete económico para 2006, traerá mayor crecimiento económico y bienestar social, aseguró la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Destacó que un superávit fiscal, además de fortalecer al Gobierno Federal al reducir la dependencia del endeudamiento y posicionarlo mejor en los mercados financieros, libera recursos que las personas invierten, las tasas de interés tienden a disminuir y se reducen las presiones inflacionarias.
"El benéfico efecto multiplicador que tendrá una disminución neta de la deuda pública supera con creces cualquier uso alternativo para esos recursos", señaló la SHCP en la nota informativa "Por qué un superávit fiscal".
Refirió que en el Programa Nacional de Financiamiento para el Desarrollo 2002-2006, el gobierno federal planteó como prioridad una estrategia fiscal que contribuyera al crecimiento económico y al bienestar social, mediante la reducción de los desequilibrios en las finanzas públicas, hasta lograr un superávit en 2006.
La dependencia explicó que un superávit fiscal significa la reducción de la deuda pública en términos netos porque el gobierno absorbe menos recursos en los mercados financieros dejándolos disponibles para la sociedad y a un menor costo relativo, lo que beneficia más a las familias de escasos recursos.
Abundó que el incremento de la oferta de créditos al consumo, la vivienda y la inversión impulsarán el mercado interno, la productividad y el empleo.