EL SIGLO DE TORREÓN
SAN PEDRO, COAH.- Para el próximo ciclo agrícola, los productores sampetrinos del sector social le seguirán apostando al algodonero en virtud de que ofrece más jornales durante el año, declaró Luis Manuel Morales Garza, ejidatario de San Antonio Gurza.
El año que está por concluir, recordó, pese a la poca disponibilidad de agua en las presas y la negativa del banco para otorgarles financiamiento, los productores establecieron una superficie regular del cultivo y lograron una producción que les permitió recuperar la inversión hecha así como obtener algunas utilidades.
La buena producción y la cobertura otorgada por Apoyos y Servicios a la Comercialización Agropecuaria (Aserca), con lo que se obtuvo buen precio, permitió a los productores una utilidad promedio del 16 al 20 por ciento, ya libre de todos los gastos, incluyendo en éstos el pago de jornales.
?Hay que tomar en cuenta que San Pedro no cuenta con pozos profundos y depende totalmente del agua de las presas para la siembra, pero no perdemos las esperanzas de seguir sembrando algodón, ya que es el que da trabajo por más tiempo en cada ciclo agrícola?, señaló.
Estimó que el próximo ciclo agrícola Primavera 2006, aún no se determina la superficie a sembrar, que será de acuerdo a lo que acuerde el Comité Hidráulico y en base al volumen de agua autorizado.
Lo importante, destacó, es que todos los productores contraten las coberturas con la finalidad de asegurar un buen precio para ya no arriesgar como se ha venido haciendo, pues en la comercialización de la última cosecha les fue bien económicamente y es necesario seguir por ese mismo camino.
San Pedro, dijo, depende del algodonero, pero tendrán que utilizar los procedimientos actuales como la compra a futuros para garantizar las ventas y una buena rentabilidad.
Morales Garza reconoció el apoyo y asesoría que han recibido por parte del Gobierno Federal y del Estado, con lo cual han logrado mantener este cultivo social por excelencia y que este año podrán aumentar la superficie para beneficio de un mayor número de campesinos, no obstante las limitantes del agua en las presas.