EFE
LA HABANA, CUBA.- La aplicación de una terapia basada en esencias de flores cubanas, como la orquídea y otras especies, en el tratamiento de diversas patologías, se ha extendido a varias naciones latinoamericanas, según indicaron especialistas de la isla.
En Honduras se están utilizando preparados acuosos de orquídeas oriundas de la provincia occidental cubana de Pinar del Río, explicó Alejandrina Peña a medios de prensa locales.
El preparado a partir de esa delicada flor es recomendado para aliviar a pacientes aquejados de artritis, migraña, neurosis, y también a quienes sufren padecimientos crónicos como la hipertensión arterial, y otros trastornos cardiovasculares asociados al envejecimiento humano, explicó la experta.
Indicó que las esencias de muchas especies florales, en especial las de colores rojos, propician la revitalización de todas las células del organismo, por lo que se sugiere su ingestión en infusiones y ensaladas.
Según Peña, autora del libro Flores que Incrementan la Salud y la Alimentación, los capullos de las orquídeas equilibran energéticamente las gónadas, glándulas secretoras de hormonas sexuales, lo que favorece la revitalización de las células del organismo.
En Cuba se aprovechan las propiedades de variedades de orquídeas propias de la isla, donde se cultivan unas trescientas especies que abundan en la localidad de Soroa, situada a unos 76 kilómetros de La Habana, en la provincia occidental de Pinar del Río.
La terapeuta cubana dijo que en Honduras las suspensiones confeccionadas a partir de las flores del marpacífico -nativas de la nación caribeña- se usan para disminuir el estrés y estados depresivos, con muy buenos resultados.
En otros países de la región como República Dominicana, se aplican esencias de flores cubanas para combatir alteraciones del sueño y múltiples dolencias.
Peña dijo que los médicos cubanos que prestan servicios en varios países de Latinoamérica, han propiciado la aplicación de estas fórmulas en gotas o masajes, que prueban sus efectos favorecedores en grupos tan vulnerables como los recién nacidos. ?Esos productos naturales no poseen ninguna contraindicación, por lo que su ingestión suele ser muy segura?, aseguró.
La depresión, la angustia, el miedo, la inseguridad, las afecciones respiratorias, las alteraciones de las vías digestivas son otros de los males para los que ofrece un alivio la terapia floral, aplicada por los servicios de salud pública de la isla.
Las flores del mango, el azahar, la rosa blanca, la buganvilla, marilope, la escoba amarga, la yagruma y la guayaba integran el grupo de flores que en Cuba se usan como alternativa a la medicina tradicional desde finales de la pasada década.
Antecedentes
La terapia floral cubana sigue el mismo principio desarrollado por el homeópata británico Edward Bach, partiendo de la filosofía de que en el organismo humano hay un equilibrio energético, roto en ocasiones a causa de una alteración emocional sostenida o aguda.
A las más de 30 recetas elaboradas por Bach en Bacteriología, Inmunología y Homeopatía se suman otras creadas en otros países, entre ellas las cubanas.
Alejandrina Peña explicó que las propiedades de esta terapia se asocian al color y la forma de las flores, capaces de equilibrar los principales centros energéticos del cuerpo, entre ellos el cerebro.
