Si existiera un cementerio de películas y ocurriera una catástrofe y la humanidad tuviera que empezar de nuevo, desenterrar esas películas sería un testimonio para saber la vida que vivieron las diferentes épocas y generaciones del ser humano. En una película, se pueden apreciar muchísimas cosas: dirección, vestuario, música, locaciones, época, actuación y, sobre todo, la intención del director de la misma, lo que él quiere contarnos. Por eso, el comprar una película clásica para atesorarla es un buen negocio, porque al realizarla se tuvo una erogación de millones de dólares, y el público la puede conseguir, en ocasiones, hasta en 50.00 (sin necesidad de que sea pirata).
Independientemente de los aciertos técnicos, que generalmente uno desconoce, lo que es fabuloso es el impacto que produce en el espectador. Las películas abordan todo tipo de argumentos, los cuales, la mayoría, han sido vividos en carne propia, o en personas cercanas a la audiencia. A veces son ?recetas de cocina?, y ésas son los ?churros?, pero cuando existen cuestionamientos y sacude las conciencias, son una obra de arte. Es importante también, apreciar los mensajes y símbolos, así como el utilizar pocas tomas para significar mucho, como por ejemplo la clásica escena del hueso del mono prehistórico de la película 2001, Odisea Espacial, que es lanzado para matar al enemigo al tratar de conseguir el territorio que contiene agua, y en la misma secuencia ese hueso se convierte en la nave espacial que va al lado oscuro de la luna para investigar un monolito, dando a entender que han pasado millones de años, en una sola ?toma?.
Una buena comedia tiene la misma base que la tragedia, crea en el público sentimientos de miedo y compasión, porque tememos ser iguales de vulnerables e incompetentes al enfrentarnos con la vida. Y, a través de la risa, la audiencia experimenta un cierto tipo de liberación. Para disfrutar las películas, debe uno verlas como lo que son, argumentos de: ciencia ficción, anticipación, infantiles, románticas, policíacas, terror, etc., porque si uno va a ver una película como Sexto Sentido y está diciéndose a uno mismo ?esto es una mugre? porque no es verdad, pues es un error. Claro que no es verdad, pero uno va a disfrutar cómo un argumento de ciencia ficción sale adelante con inteligencia. Es como no disfrutar una película de Walt-Disney porque pensamos que es mentira que los animales hablen.
La materia prima del arte no es arte, es materia prima (como diría Freud). Lo que vemos en la pantalla no es la vida cotidiana, es una visión de pesadilla, pero, (como también diría Freud), esas pesadillas dicen más sobre la esencia de una persona que lo que ocurre mientras realiza sus tareas diarias. La tragedia es la vida en un primer plano, y la comedia es la vida en un plano general.
¡Gocemos con el Séptimo Arte!? es un espectáculo que vale la pena disfrutar.
