LA CINEMATOGRAFÍA
Constantemente se dice que el cine sirve para promocionar ideas de muerte, destrucción, agresividad, y sobre todo actualmente, de pornografía; sin embargo, el cine también es una diversión y un arte que sirve de vehículo para educar, señalar lacras sociales, documentar acontecimientos reales y despertar conciencias en los espectadores. Se piensa que si se enterraran las películas actuales y éstas fueran encontradas en el futuro muy lejano, los seres humanos podrían tener una idea muy clara de cómo es la época que estamos viviendo a través de lo que se ha plasmado en los films.
Ayaan Iris, mujer que escapó de Somalia para evitar la degradación que sufren las mujeres en ese país, ha escrito libros sobre el tema y acaba de colaborar como escritora y narradora de un film llamado Sumisión, que relata historias de violencia doméstica y muestra a mujeres con pasajes escritos del Corán tatuados en sus espaldas. Sin embargo, curiosamente, ha recibido críticas de organizaciones de mujeres maltratadas, sobre todo en Holanda, porque dicen que eso es algo muy privado, censurando particularmente que la autora recite las plegarias personales que dirigen las protagonistas de la película hacia Dios.
Las detractoras dicen que en lo que toca a la degradación de la mujer, la ?emancipación tiene que venir de la propia comunidad musulmana y es ahí donde se debe resolver el problema?. Ayaan Iris se defiende, alegando que acepta las críticas porque eso es legítimo, pero que la democracia acepta también la libertad de expresión y ella desea ayudar a la mujer sometida.
El problema principal radica en que, como esas costumbres están muy arraigadas por su idiosincrasia es difícil que desaparezcan, pero tal vez no imposible y a la larga se logre algo. A las personas que les interese el tema, les recomiendo el libro La Calle de las Vírgenes, de autora egipcia. (No les puedo proporcionar más información sobre este libro porque no lo tengo, me lo prestaron en la Ciudad de México y lo regresé).