Este artículo tiene su base en uno de los libros más conocidos del Erich Fromm El Arte de Amar, el objetivo es analizar una de las ideas fundamentales de Fromm y tener una idea concreta, abstracta y realista de lo que es el amor humano.
En el libro se hacen varias e importantes conclusiones, una de las principales es que el amor humano no ha de ser miope o torpe, tiene que estar apoyado en la inteligencia y conocimiento, otra es que para amar es indispensable haber evolucionado (madurado) mentalmente hasta llegar ser mentalmente adulto que es cuando el amor se manifiesta como la necesidad de proteger, dicha emoción se observa en seres evolucionados y gregarios (sociales) en la naturaleza.
El arte se considera como la realización creativa de la inteligencia y sensibilidad humanas, el amor es un instinto que al humanizarse hace de la emoción una de las fuerzas más esperanzadora para el desarrollo, felicidad e incluso supervivencia del hombre en la naturaleza.
El amor humano tiene y ha tenido desde el principio muchos obstáculos, la ignorancia, la sensación de peligro constante, la carencia o sensación de que existe, el egoísmo generalizado y exagerado, la ira y el odio son situaciones y emociones que no permiten que se realice con mayor plenitud, la realidad nos enfrenta a riesgos reales, la sugestión los exagera y con no poca frecuencia los imagina fabricando miedo ira e incertidumbre que alejan del amor acercando a la desconfianza y a pensamientos o acciones destructivas.
Las épocas y las circunstancias que les acompañan influyen sobre las creencias y emociones de las grandes masas de la población, en la actualidad los sistemas económicos que se sustentan del miedo e incertidumbres para funcionar alejan del amor y nos acercan al miedo, desconfianza y destructividad, existen cosas que parecen útiles pero no son importantes, sin embargo la fuerza social sugestiva nos hace ilusionarnos con lo intrascendente, el despilfarro de recursos y las presiones emocionales nos alejan del bienestar real, la dependencia a las cosas muertas hacen que el natural apego a lo vivo disminuya, E. Fromm ejemplifica al hombre que cuida más su coche que su esposa e hijos o a la mujer que anhela viajes, joyas y posición social disminuyendo su capacidad para amar al esposo, hijos y a los demás, el efecto negativo sobre la mente produce lo que E. Fromm califica como personas ?medio vivos? o amantes de lo muerto, también recuerda la expresión famosa de un falangista español (fascista) al gritarle a Unamuno en una universidad ?viva la muerte? emoción y pensamiento que proviene del efecto limitante y destructivo de cualquier ideología que no toma en cuenta la realidad y no respeta la naturaleza humana, la enajenación (expresión usada frecuentemente por Fromm) es el dejar de ser uno mismo o estar fuera de sí, es impresionante con qué facilidad se puede llegar a este peligroso y limitante estado sin darnos cuenta, con frecuencia el enajenado está seguro de estar más ?ubicado? que los demás.
Los mecanismos psicológicos de la sociedad industrializada son complicados y llevan dentro la enorme posibilidad de enajenación como producto de la sugestión masiva, el resultado es el riesgo de una existencia infeliz, acelerada, superficial y frustrante, riesgo que puede disminuirse al hacer conciencia de ello, ejercitar la inteligencia y tener una cultura general profunda y amplia, puede entonces lograrse la combinación constructiva de la abundancia que nos brinda el sistema para usarlo racionalmente evitando estimular irracionalmente necesidades inútiles, es una realidad que el arte de amar puede hacer creaciones humanas de gran valor personal y social.
Uno de los elementos fundamentales para lograr que el amor sea un arte es la fuerza pues es difícil si no imposible que una persona con debilidades psicológicas pueda sentir verdadero amor a sí mismo a su pareja, hijos, familiares, amigos y a la humanidad entera, la inmadurez o debilidad en el adulto provoca que en lugar se sentir placer por proteger busque ser protegido por los demás, necesidad que se manifiesta de múltiples y variadas formas, como ejemplos una gran sensibilidad a la opinión ajena, sentirse frecuentemente víctimas de la injusticia al no recibir lo que infantilmente están solicitando (atención, cuidado, protección, aceptación, etc.), huir por medio de ideas fuera de la realidad para evitar enfrentarse a ella (fácilmente sugestionables), su fragilidad los imposibilita para que el instinto amoroso funcione adecuadamente a la edad en que debiera estar presente a pesar de creer que lo que sienten es amor, estas personas no pueden hacer felices a los que le rodean y viven una existencia dolorosa y frustrante.
Erich Fromm es un psicólogo social romántico que no tomó suficientemente en cuenta que tanto la inteligencia como la capacidad natural para amar está escrita en los cromosomas de nuestro código genético, tiene razón al descubrir que los pensamientos y emociones que prevalecen en la sociedad y la familia influyen en gran medida sobre el cerebro y mente, también respecto al riesgo de que a la estructura social y productiva no le interese el ser humano al cual debiera servir, que a la maquinaria económica, política y social le importe principalmente el aumentar las utilidades o lograr el mejor y más confiable control sobre la población para que el sistema económico funcione sin contratiempos, el resultado es que en algunos países la delincuencia y destructividad están en aumento, en otros ya no les interesa tener hijos ya que no encajan en sus proyectos de vida (?), el aparente interés humano está sólo como parte de la mercadotecnia para disminuir en lo posible el disgusto social, la filantropía promueve la caridad pero no el respeto a los demás lo que significaría disminuir la sensación de superioridad e inferioridad en las relaciones humanas, lo que provocaría miedo a la población más favorecida, no es sorprendente que la ciencia avance en muchísimas áreas pero la sociología, antropología, economía, psicología y el estudio profundo y científico del ser humano está exageradamente descuidado pues el que la población vea la realidad puede hacer temblar el sistema, el arte de amar debe esperar mejores tiempos y circunstancias para manifestarse con mayor plenitud pues necesita de la tranquilidad que da el conocimiento y la racional abundancia generalizada, ambas posibles de alcanzar dentro de un sistema económico social más racional.
Erich Fromm encontró tantos riesgos en el desear intenso, crónico y generalizado que posiblemente esto lo motivó a la filosofía budista donde se pretende disminuir los deseos al máximo.
Dentro de los inconvenientes y virtudes de la época actual se encuentra el libre albedrío que es tan libre como lo es el conocimiento, inteligencia y fuerza individual que actúa apoyando y dirigiendo nuestra formación así como a los que como adulto están aprendiendo de nosotros, el amar humano se puede llamar un arte cuando interpreta en forma concreta, abstracta e inteligente a los demás, el impulso a proteger y educar es la fuerza, la humanización nos dice cómo y para qué.
