El 27 de septiembre pasado, durante la comparecencia de la secretaria de Desarrollo Social, Josefina Vázquez Mota, en el Senado, en el marco de la mal llamada ?glosa? del quinto informe del presidente Vicente Fox, la senadora priista Noemí Guzmán Lagunes, cuestionó a la funcionaria preguntándole por qué seguía laborando en esa dependencia Ricardo Cícero Betancourt como coordinador de Programas de Atención a la Pobreza Urbana, quien había sido separado de su cargo por la investigación que realizaba la Secretaría de la Función Pública por las acusaciones de corrupción que había en su contra como secretario técnico de la Coordinación General de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación.
Ese señalamiento le motivó a la legisladora veracruzana un inmediato y airado reclamo del subsecretario de Desarrollo Urbano y Ordenación Territorial de la Sedeso, Rodolfo Tuirán Gutiérrez, quien defendió al hoy destituido, inhabilitado y multado ex funcionario que fuera un colaborador de confianza de la ex titular de la misma, Carmen Segura Rangel, sancionada también por la SFP y quien hoy enfrenta, además, una investigación iniciada por la Procuraduría General de la República sobre el desvío de mil 350 millones de pesos del Fondo Nacional de Desastres Naturales del que se le responsabiliza, independientemente de la averiguación que hace unos meses le abrió la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales por promover la precandidatura presidencial de su entonces jefe, el ex secretario de Gobernación, Santiago Creel.
Ante la actitud de ese funcionario, dos días después, en la sesión del 29 de septiembre, el coordinador del grupo parlamentario del PRI y presidente del Senado, Enrique Jackson, leyó desde la tribuna una carta que dirigió al secretario de Gobernación, Carlos Abascal, en la que solicitó una disculpa pública a la senadora Guzmán Lagunes de parte del subsecretario, la cual hasta ahora no se ha dado.
Ante eso y luego de que Cícero Betancourt fue removido, inhabilitado y multado con un millón 773 mil pesos por la Secretaría de la Función Pública -igual que lo fueron su ex jefa y el ex coordinador administrativo del Fonden, Cliserio Jiménez Fernández- se espera que de un momento a otro, el mismo Jackson exija que el subsecretario Tuirán Gutiérrez lo haga ?ante la falta de respeto y de tacto político? en el que incurrió como representante del poder Ejecutivo ante el Legislativo.
En contraste con la actitud que asumiera el secretario de Gobernación, Carlos Abascal, que también compareciera en el Senado 20 días antes para hablar del quinto informe presidencial y quien reconoció que tenía informes confirmados que en el Fonden se había cometido un fraude, en la de Vázquez Mota hubo empeño en eludir los cuestionamientos de la senadora Guzmán Lagunes -sobre todo de parte del subsecretario Tuirán Gutiérrez- cuando preguntó por qué la titular de la Sedeso mantenía a Cícero Betancourt, que era investigado por la SFP.
La destitución e inhabilitación por diez años para ocupar un cargo público y la aplicación de una multa de un millón 733 mil pesos -idéntica sanción que la Secretaría de la Función Pública impuso a Segura Rangel y al ex coordinador administrativo del Fonden- le dio la razón a la senadora veracruzana que ahora espera la disculpa pública del subsecretario de la Sedeso.