En su fallido intento por introducir cerca de cien gramos de drogas al Centro de Rehabilitación Social No. 1 (Cereso), fue detenido Pedro Rocha Mares, quien ocultaba en la cavidad rectal tres paquetes con ?cristal? y marihuana que pretendían ser entregados al parecer a su hermano. Este sujeto cuenta con antecedentes de homicidio y lesiones.
Fue la mañana del domingo pasado cuando en las visitas Pedro, de 40 años y con domicilio en la colonia Santa María, fue delatado por su propia actitud sospechosa, de ahí que fuera revisado en el cubículo de cacheo por los propios custodios.
Al cerciorarse de que en verdad portaba algo en su cuerpo fue necesario llevarlo a la enfermería del Centro de Rehabilitación y mediante rayos-X fue posible observar cómo los cuerpos extraños de aproximadamente diez y cinco centímetros estaban en la cavidad.
Tras su detención fue necesario llevarlo al Hospital General, donde los médicos extrajeron los tres envoltorios que al ser entregados al agente del Ministerio Público de la Federación para su pesaje, dos de ellos dieron un total de 52.5 gramos de ?cristal?, aproximadamente, repartidos en 29 diminutos ?globitos? listos para su venta y 45 gramos de marihuana.
Cinta canela y nailon transparente componían la capa exterior de los paquetes, que al parecer iban a ser entregados a su hermano Magdaleno, que lleva tiempo recluido en el penal.
El director del Cereso No. 1, Oliverio Reza Cuéllar, informó que Pedro Rocha Mares purgó una condena en 1991 por delitos de homicidio y lesiones, agregando que ahora pudiera pasar más de 25 años tras las rejas al tratarse de un penal, siendo éste el primer intento del año.
