México, (EFE).- La tradicional gastronomía mexicana será propuesta por segunda vez como Patrimonio de la Humanidad con la intención de preservar sus platillos, algunos de ellos en riesgo de perderse, informaron autoridades culturales.
En 2002 la cocina mexicana fue propuesta para entrar en esa lista de la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia y la Cultura (UNESCO), pero no se logró el cometido.
Gloria López, representante del comité que impulsa la iniciativa, dijo a la prensa que será en septiembre cuando se presente la propuesta para que la comida mexicana sea Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad.
López señaló que la distinción como patrimonio mundial salvaría a la gastronomía mexicana que ante la globalización corre el riesgo de perder sus más tradicionales platillos.
Advirtió de que México fue exportador y luego autosuficiente en la producción de maíz y frijol, pero ahora también lo importa.
Miembros del comité dijeron que la comida mexicana -con una tradición de ocho siglos- ha dado numerosas aportaciones a la gastronomía mundial, como el maíz, el jitomate (tomate), el aguacate, el cacao, la vainilla y el guajolote (pavo).
Otras aportaciones son el maíz azul, morado, pinto, naranja y blanco así como su hongo, el huitlacoche, la gran variedad del frijol y la de los chiles (ají), el piloncillo de caña y los gusanos de maguey.
